Después de unos meses saneando deudas e intentando encontrar un tono más moderado, Sociedad Civil Catalana (SCC) ha vuelto a su esencia y ha recuperado la iniciativa y el duro discurso contra el independentismo. Este viernes la dirección de la entidad presentó una batería de acciones para los próximos meses para combatir el procés, entre ellas, una de sorprendente. La entidad unionista ha decidido cortar el acceso a los túneles de Vallvidrera cada viernes hasta que se acabe la protesta diaria en la Meridiana que ya hace cuatro que meses que dura. Un hecho que consideran "intolerable". Pero más allá de la incoherencia de protestar por un corte de carretera con otro corte, sorprende el motivo que los organizadores dieron para hacerlo.

"Hasta que los trabajadores no puedan volver tranquilamente a casa después de largas jornadas de trabajo, los independentistas tampoco podrán ir a esquiar con tranquilidad los fines de semana", afirmó el presidente de la entidad unionista, Fernando Sánchez Costa. Una afirmación llena de estereotipos, pero que, además, los datos desmienten. Con esta argumentación simplista, sólo entendida como eslogan, da a entender que los independentistas son todos ciudadanos ricos que tienen casa en La Cerdanya y se pueden ir a esquiar, mientras que los unionistas –constitucionalistas en sus propias palabras– son los trabajadores que tienen que hacer "largas jornadas de trabajo" para llegar a fin mes.

¿En Catalunya hay dos millones de ricos? Nada más lejos de la realidad. Si bien es cierto que, a grandes rasgos, el independentismo consigue el mayor grueso de votos de las clases medios y que los sectores más desfavorecidos acostumbran a tener un voto más unionista, también lo es que las clases más altas, especialmente en Barcelona, están en contra la independencia. De hecho, para rebatir el argumento de Sánchez Costa sólo hay que cruzar los resultados por barrios de las últimas elecciones con las cifras de las rentas de los ciudadanos que habitan allí.

En los barrios más ricos: mayoría unionista

Según datos del Ayuntamiento de Barcelona, los barrios con rentas más altas de la ciudad son, por este orden, Pedralbes, Les Tres Torres, Sarrià, Sant Gervasi - Galvany y Sant Gersvasi - La Bonanova, con rentas brutas medias de entre 80.000 a 100.000 euros al año. Según el argumento de SCC, en estos barrios tendría que ganar el independentismo, sin embargo, la realidad es todo lo contrario. De estos cinco barrios, sólo en Sarrià ganó un partido independentista el pasado 10-N, JxCat. En los otros cuatro barrios ganó el PP y Vox sacó unos buenos resultados. Además, la suma de los tres partidos independentistas que se presentabas en las urnas –JxCat, ERC y la CUP– fue muy pobre en los cuatro lugares.

En Pedrables el independentismo sólo consiguió un 32,6% de los votos frente al 60,7% que se llevaron las fuerzas partidarias de la unidad de España. Una situación similar a la que se produjo en Les Tres Torres, donde quedó 34,8% a 57,8%, en Sant Gervasi - Galvany donde la diferencia fue de 38,2% a 51,8% o en Sant Gervasi - La Bona Nova que fue del 38,4% para los independentistas y del 51% para los unionistas. Con estos datos en la mano, pues, sorprende que Sociedad Civil Catalana haya decidido hacer un corte de tráfico justamente en este zona, donde la mayor parte de los vecinos son unionistas. Si la idea es realmente perjudicar a los independentistas, y no generar un titular de prensa, está claro que el sitio escogido no es el más indicado.

Por contra, en la zona donde se celebra diariamente el corte de la Meridiana los datos también desmienten en parte el argumento que SCC quería imponer. Los vecinos de la zona, especialmente los que viven por debajo del corte que se forma diariamente delante de la estación de Sant Andreu, no son tan unionistas como se podría pensar. De hecho, en Sant Andreu, en Congrés y en Navas fue ERC quien ganó las últimas elecciones generales y en los tres barrios el voto independentista fue superior al unionista. También es cierto, sin embargo, que el PSC ganó a muchos de los barrios de la zona y que como más baja es la renta de estos barrios, también baja sustancialmente el apoyo a la independencia.

Valls arrasó en la zona alta el 26-M

Además, las elecciones generales del 10-N no son una excepción. En las últimas elecciones municipales, celebradas el pasado 26 de mayo, en los barrios más ricos de Barcelona fue donde justamente la candidatura de Manuel Valls con Ciudadanos arrasó. En Pedralbes consiguió un 34,8%, en Les Tres Torres un 33,8%, en Sant Gervasi - Galvany un 27,8% y en Sant Gervasi - La Bonanova un 27%, mientras que en Sarrià ganó pero con un margen más estrecho y un 21% de los votos. Por lo contrario, en la Meridiana el voto fue más repartido entre los comunes y el PSC y con ERC también pisándolos en algunos de los barrios, como en Sant Andreu donde prácticamente empató con Ada Colau.

Sociedad Civil se estrenará cortando carreteras el próximo día 6 y, en principio, tiene previsto mantener la protesta cada viernes hasta que la administración acabe con la protesta de la Meridiana o hasta que los vecinos desistan. Teniendo en cuenta, sin embargo, que Merianda Resisteix hace casi 150 noches que dura y que desde el departamento de Interior de la Generalitat ya han avisado de que no tienen ninguna intención de prohibir ninguna de las dos concentraciones, habrá que ver cuál es la capacidad de resistencia de la entidad unionista. Si dura demasiado, sin embargo, puede acabar siendo un tiro en el pie, perjudicando a sus propios simpatizantes.