Sociedad civil Catalana (SCC) ha pedido de nuevo por carta una reunión con el Assemblea Nacional Catalana (ANC) para "rebajar la tensión", y ha advertido que "todos tenemos la responsabilidad de parar cualquier espiral de enfrentamiento y trabajar a favor de un ambiente de serenidad". Esta es la segunda reunión que solicita la entidad, después de que la asamblea condicionara un encuentro a que pidieran la libertad de los dirigentes independentistas en la prisión.

"Nuestras entidades tienen la obligación y el deber de contribuir a rebajar la conflictividad social y evitar cualquier chispa de enfrentamiento civil", reflexiona en voz alta el presidente de SCC, José Rosiñol. Además, la entidad apuesta para "proclamar conjuntamente la importancia a que tiene el respeto a las reglas de juego de la legalidad democrática" y quiere hablar con la ANC de "cómo evitar entre todos la apropiación absolutista de las palabras y la descalificación global del adversario, así como reivindicar los derechos y las libertades fundamentales de todos los catalanes sin excepción".

SCC sostiene que "la concordia civil es un bien común que tenemos que preservar entre todos" y concluye la carta diciendo que quedan "a la espera de poder cerrar una fecha para esta reunión".