El actual secretario general del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Luis García Terán, ha asegurado que el servicio de inteligencia español quería "reclutar como infiltrado" a Abdelbaki Es Satty cuando estaba en la prisión en el 2013 por una condena de tráfico de drogas, porque "tenía contactos indirectos" con grupos radicalizados que iban a luchar al Iraq, pero que después lo descartaron porque "no era fiable", ni su información era de valor para prevenir atentados. Así lo ha explicado García Terán este jueves, en una nueva sesión comisión de investigación de los atentados de Barcelona y Cambrils el 17 de agosto del 2017 en el Congreso de los Diputados. Y preguntado si el CNI pagaba 500 euros al mes a Es Satty, como publicó el diario ABC el abril pasado, lo ha negado rotundamente: "Nunca se dio dinero a Es Satty". Y ha asegurado que los pagos del CNI "están fiscalizados hasta el último céntimo", aunque no ha querido aclarar si salen de los fondos reservados u otras cuentas del Estado español.

García Terán, nombrado el número 2 del CNI el diciembre pasado, también ha asegurado a los diputados que "el centro no tenía ningún conocimiento previo" de los atentados del 2017, como se ha denunciado, ante las declaraciones de algunos políticos del Gobierno del PP. También ha manifestado que después de los atentados del 17A y al saber que Es Satty murió en la explosión de Alcanar y que estaba vinculado a la celula yihadista, "fueron los primeros en dar información a los Mossos".  Es Satty fue contratado como imam de Ripoll a finales del 2016. En su intervención inicial, el experto ha advertido de las limitaciones de dar información, que lo obliga la ley que clasifica en secreto el funcionamiento CNI, pero ha confesado que en los 32 años que lleva en el CNI "ha tenido que hablar con yihadistas, a pesar de que no es un plato de gusto, para evitar atentados, como todos los hombres y mujeres del CNI".

Junts reclama más desclasificaciones

En la comisión, la diputada de Junts Pilar Calvo ha denunciado que "el PSOE no tiene ningún interés de desclasificar más documentos de los solicitados" y ha preguntado a García Terán por su tarea en la División de Contraterrorismo de Girona durante los atentados de Barcelona y Cambrils de agosto del 2017, y —según algunas informaciones— habría tenido alguna información directa del imán de Ripoll. El número 2 del CNI ha sido tajante: "No existe ni ha existido nunca la División de Girona y no puedo informar de lo que existe". Y ha asegurado que no hay ningún informe sobre las aportaciones hechas por el imán de Ripoll al CNI.

El exdirector del CNI entre los años 2009 y 2019, Félix Sanz Roldán, admitió en la comisión del 17A, en noviembre del 2024, que el CNI fue a ver a Es Satty a la prisión. Después, con información desclasificada, los diputados han descubierto que también se le dio un número móvil donde llamar, "no un aparato móvil", ha aclarado el secretario general del CNI, y ha añadido que hay "centenares" de personas que tienen este contacto con el CNI.

¿Es Satty engañó a todo el mundo?

García Terán ha negado que pidieran a una magistrada que denegara la expulsión de Es Satty a Marruecos, a preguntas del diputado Jon Iñarritu, del grupo EH Bildu, que es quien le ha preguntado si el servicio secreto español tenía a sueldo al imán de Ripoll. 

Los diputados Francesc Marc-Álvaro (ERC) y Eloi Badia (Sumar) han insistido en preguntarle qué falló y si la conclusión es que Es Satty "engañó a todo el mundo". La respuesta del secretario general del CNI ha sido clara: "No somos perfectos. Y hasta diciembre del 2014, que tenemos contactos con él, no teníamos ningún indicio ni información que era una amenaza". El número 2 del CNI también ha alabado y recordado la explicación que dio a la comisión David Sánchez Sala, experto en yihadismo y ex subjefe de la Comisaría General de Información (CGI) de los Mossos d'Esquadra, que el imán Es Satty "no radicalizó a los jóvenes de Ripoll, sino que fue un catalizador".

Tres razones para captarlo

Ante el reclamo de que aclarara la relación del CNI con Es Satty, García Terán ha detallado que lo quisieron contactar por tres razones: para saber si tenía contactos con la célula radical de Vilanova i la Geltrú (operación Chacal), que fue negativa; por su potencial como fuente por sus contactos en Castellón, que "no fue fiable", y finalmente se le dio un número de teléfono ante la necesidad de tener información de prevención de ataques, aunque ha asegurado que los contactos acabaron a finales del 2014.

La diputada de Junts le ha recordado, sin embargo, que en el juicio en la Audiencia Nacional por el 17A el responsable de la mezquita Belga declaró que Es Satty les dijo que tenía contactos con los servicios secretos. El número 2 del CNI lo ha negado y ha declarado: "Es una incongruencia. Nadie que esté en su sano juicio dice que es fuente del CNI por seguridad". Ha añadido que puede que lo dijera porque le reclamaban la hoja de antecedentes penales y no los daba porque tenía por tráfico de drogas. Y por eso después fue contratado en la mezquita de Ripoll, donde no se pedían hasta después de los atentados.

El número 2 del CNI ha admitido que los atentados de Barcelona y Cambrils provocaron "un cambio de paradigma" en las actuaciones de prevención y actuación, no solo para los servicios secretos españoles, "sino también de los servicios europeos", aunque ha alertado: "Nos enfrentamos a una amenaza terrorista cada vez más complicada y difícil de controlar".