Nueva carta de Pedro Sánchez; esta vez a la militancia del PSOE a consecuencia del caso Cerdán. El presidente del Gobierno pide confianza a los miembros de su partido, a pesar del escándalo que ha provocado el conocimiento de una trama de corrupción liderada presuntamente por los dos secretarios de Organización que han tenido el timón de la formación desde que él es el secretario general. En la misiva, de todos modos, asegura que el partido y el ejecutivo "se enfrentan a una operación de demolición moral" que implica, entre otras cosas, filtrar informes de la Guardia Civil "al servicio de un intento deliberado de la derecha para abatir un gobierno legítimo". En este texto traslada su intención de mejorar las herramientas del Estado para perseguir la corrupción, vuelve a retar a Alberto Núñez Feijóo a presentar una moción de censura y mantiene su idea de continuar anclado en la Moncloa: "Continuaremos adelante".

 

Sánchez empieza su texto haciéndose eco del "dolor, indignación, desconcierto y tristeza" que ha provocado el informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que sitúa a Santos Cerdán, José Luis Ábalos y Koldo García al frente de una trama de cobro de comisiones a cambio de adjudicaciones de obra pública. "Compartimos este sentimiento", asegura. Ahora bien, destaca que "ningún partido está protegido de la infamia de la corrupción, pero lo que marca la diferencia es como se reacciona ante ella". En el texto destaca como síntoma de buena salud democrática de España que su gobierno no se enterara del contenido del informe policial antes de que se hiciera público. "Lo que sí que es censurable es que se haya puesto el contenido de este informe al servicio de un intento deliberado de la derecha para abatir a un gobierno legítimo", añade.

A partir de aquí, empieza a disparar contra el PP. "La corrupción se combate con mejores herramientas; y es lo que haremos, apelando una vez más al debate sereno con los que quieran sumarse a él para aportar y mejorar; si la derecha se borra de este debate, como seguramente hará, es porque su prioridad es otra: derribar al gobierno al precio que sea". Es entonces cuando reta a Feijóo a presentar una moción de censura contra él, después de muchas declaraciones en las que ha exigido la dimisión del presidente español. "Tienen a su disposición una herramienta constitucional que es la moción de censura para presentar un proyecto alternativo de país; no lo harán porque no tienen ninguno; lo único que son capaces de ofrecer pasa por el apoyo de una fuerza ultraderechista incompatible con el progreso, los derechos y las libertades".

A continuación, Sánchez acusa a PP y a Vox de "legitimar la violencia" que se ha perpetrado en "el acoso de muchos militantes socialistas y el ataque en numerosos" cuarteles de militantes. "Puede ser que el PP haya renunciado a defender las conquistas y valores fundamentales de nuestra democracia; nosotros no lo haremos nunca"; añade.

Por último, el presidente del Gobierno asegura a los militantes del PSOE que se mantendrá al frente del Gobierno y del partido "con la misma ilusión y ganas que el primer día". "Continuaremos adelante; porque los socialistas siempre nos hemos animado ante la adversidad", añade. Sánchez sentencia el texto asegurando que se enfrenta "a una operación de demolición moral, por procedimientos que conllevan más peligro para la democracia".