El presidente español, Pedro Sánchez, ha anunciado que tiene intención de encabezar la primera reunión de la mesa de negociación entre el gobierno español y el catalán que se tendría que celebrar este mes de febrero. Ha insistido en la necesidad de recuperar el diálogo para superar el conflicto pero no ha entrado a concretar sus propuestas. "Siempre he pensado que aquellos que tenemos posiciones firmes no tenemos miedo de hablar de nada", ha asegurado.

"Soy consciente de que el camino no será fácil ni rápido, hay heridas muy profundas que no se cierran así como así. Llevará tiempo y esfuerzo. Y quizás nos sorprendamos que el reencuentro es más rápido que lo que inicialmente podíamos prever," ha pronosticado.

A pesar del optimismo que ha querido transmitir, la primera condición que ha descartado es la del mediador. Sánchez ha garantizado que el diálogo será "franco, transparente y sincero", por lo cual considera que serán todos los españoles los testigos y no hará falta un mediador.

Sobre la posibilidad que las reivindicaciones sobre la amnistía y la autodeterminación estén encima de la mesa ha asegurado que "una democracia es fuerte cuando es capaz de dialogar".

Con todo ha admitido que las cuestiones que plantea Torra demuestran que el diálogo será largo y no fácil, y habrá que avanzar paso a paso en medio de posiciones muy distantes. "Soy un firme defensor del autogobierno de Catalunya porque creo que es integrador y aglutina más el sentimiento de la población de Catalunya", ha añadido en relación al debate sobre autodeterminación.

El presidente, que ha comparecido en la galería gótica después de reunirse durante una hora y cuarto con Torra, ha empezado su intervención afirmando que hoy es un día muy importante para Catalunya y el conjunto de España porque "a juicio del gobierno tiene que empezar el diálogo para el reencuentro".

En la intervención inicial ha recordado que en su discurso durante el debate de investidura instó a recomenzar el diálogo y a reanudar el camino de la política dejando atrás la judicialización, para retorma la senda del diálogo, negociación y pacto. "No hay otra forma de resolver este contencioso", ha advertido porque "la ley por sí sola no basta".

 

"He venido con un profundo sentimiento de honor al Palau de la Generalitat para reunirme con el actual president y dialogar", ha explicado además de agradecer el tono de Torra en una conversación que ha descrito como respetuosa. Según Sánchez, el significado de este encuentro es "mostrar la voluntad sincera de dialogar y acordar" y lo ha hecho con "profundo respeto y emoción"

Ha admitido que resulta difícil encontrar el punto en que todo se torció pero ha reconocido que la última década ha sido dominada por el enfrentamiento y que nadie ha ganado a raíz del conflicto y la tensión social. "Nadie ha ganado. Todos hemos perdido" y sólo ha dejado una estela de desánimo y hartazgo en el conjunto de la ciudadanía", ha advertido.

Sánchez ha asegurado que había venido "a hablar de esperanza y reencuentro" para conseguir un cambio de rumbo y un nuevo camino de diálogo. "La forma de hacer política tiene que cambiar radicalmente y este es mi propósito, desplegar una acción dirigida al reencuentro. Pero el sentido más noble de la política, la resolución de los conflictos a través del diálogo y el acuerdo," ha advertido.

El presidente español, que ha hablado de bienestar social, desigualdades y de cambio climático, ha admitido que hay sectores que se resisten al diálogo y que las negociaciones tropezarán con estos obstáculos, pero que se conseguirá superar cuando los opuestos al diálogo constaten que no hay alternativa.

Ha asegurado que se esforzarán por hablar en nombre de todos los españoles, que situarán como guía "el bien común y el interés general". Pero también ha añadido que acudía como presidente de un gobierno de coalición progresista que obtuvo las últimas generales un apoyo muy amplio. "Hablaremos en nombre de miles de ciudadanos españoles y de millones de catalanes de que reclaman respeto", ha añadido.

Sánchez, que se ha presentado en el Palau de la Generalitat, con una propuesta con diferentes ejes, ha pedido a Torra que se replantee la no asistencia en el Consejo de Política Fiscal y Financiera del viernes.