Pedro Sánchez ha ofrecido este lunes su habitual rueda de prensa semestral para hacer balance de su acción de gobierno. Se trata de una comparecencia centrada en analizar los datos macroeconómicos del Estado español y sacar pecho de los avances sociales de los últimos meses. Pero el presidente socialista se ha visto obligado a incluir en el arranque de su discurso una mención especial a los nuevos escándalos que le acorralan: las nuevas tramas de corrupción y los casos de acoso sexual dentro del PSOE y de la Moncloa. En su comparecencia ante los medios en este mismo palacio, ha asegurado haber respondido con “contundencia” y no “connivencia” ante todos los episodios. Ha descartado convocar elecciones y se ha mostrado decidido a agotar la legislatura.
El jefe del ejecutivo ha señalado que todas las conquistas de derechos para las mujeres se han producido gracias al PSOE. “No aceptaremos lecciones de quienes recurren estos avances ante el Tribunal Constitucional, de quienes cuestionan la violencia de género o de quienes pactan con ellos”, ha afirmado. Sobre los casos de corrupción, ha hecho uso del y tú más y ha recordado que la sede del PP estuvo pagada con dinero negro. El presidente español ha denunciado las “campañas del fango”, pero ha asegurado que agotará la legislatura con “determinación”. Ha reconocido, eso sí, que actualmente no tiene una mayoría garantizada en el Congreso de los Diputados, sobre todo después de la ruptura con Junts per Catalunya. “Es evidente que no tenemos mayoría, pero sí grandes resultados”, ha dicho.