Ya puede cruzar el Atlántico, que el monotema de la política española sigue siendo uno: los indultos a los presos políticos. A sólo cuatro días de la concentración españolista de Colón. Desde Argentina, donde se encuentra de viaje oficial, Pedro Sánchez ha continuado con la pedagogía. Esta vez ha pedido "comprensión y magnanimidad" a los que puedan tener dudas sobre la medida de gracias. "El objetivo vale la pena", ha defendido, pidiendo una oportunidad para intentar encauzar el conflicto catalán.

 

En rueda de prensa desde la Casa Rosada de Buenos Aires, acompañado del presidente argentino Alberto Fernández, el presidente español ha sido preguntado por la carta de Oriol Junqueras. La ha aplaudido, porque "cualquier paso a favor de la distensión es bienvenido". Dicho esto, ha admitido que "puede haber ciudadanos que puedan tener reservas sobre esta decisión" después de los hechos del 2017, con las leyes de desconexión, el referéndum "ilegal" del 1-O y la declaración unilateral de independencia. Y a ellos se ha querido dirigir.

"Pido que tengan confianza, tenemos que hacer una apuesta por la convivencia y la reparación", ha sostenido Pedro Sánchez, que ha asegurado que hay que transitar de "un mal pasado a un futuro mejor". Eso, ha añadido, "implica también magnanimidad". Ha insistido en este concepto: hacen falta "comprensión", "magnanimidad" y "pasos de distensión". Y ha concluido al respecto: "El desafío que tenemos por delante merece la pena. El objetivo vale la pena".

Sobre el calendario, todavía está todo por concretar. El presidente español no ha querido adelantar fechas, pero ha insistido en que primero vendrá la reunión bilateral con el president Pere Aragonès en La Moncloa, y "después ya veremos cuándo se tiene que celebrar" la mesa de diálogo. Ha defendido la "voluntad y vocación" de su ejecutivo de "abrir un nuevo periodo en Catalunya, fundamentado en el diálogo, la negociación y el acuerdo, respetando siempre los márgenes de la Constitución y la seguridad jurídica".

Sánchez tampoco se ha pronunciado sobre la hipotética presencia de Oriol Junqueras en esta mesa de diálogo. Si bien ha remarcado que es un órgano "entre gobiernos", también ha asegurado que "no le gusta vetar a nadie" ni especular sobre quién tiene que estar y quién no.

¿Remodelación de gobierno?

Cuando se aborde esta carpeta caliente de los indultos y la mesa de diálogo, corren rumores de una crisis de gobierno controlada, antes de las vacaciones de verano. Los rumores son trasladados desde la misma Moncloa. Sin embargo, el presidente español ha asegurado que está "concentrado" en la vacunación y la recuperación económica. "Lo demás no es prioritario", ha concluido.