El diputado de ERC, Gabriel Rufián, ha mantenido un tenso e irónico cara a cara con la vicepresidenta Soraya Saénz de Santamaría durante la sesión de control en el Congreso de este miércoles, debido al "cuerpo del delito" del referéndum, en palabras del republicano: una impresora.

Rufián ha increpado a Santamaría, exhibiendo este material de oficina, sobre por qué había dicho aquellas palabras de "ha muerto la democracia" la semana anterior, cuando se produjo la votación en el Parlament sobre las leyes de desconexión. El de ERC ha exhibido entonces la impresora y ha cargado contra la vicepresidenta sentenciando que "dejaran de hacer el ridículo y perseguir impresoras", como sucedió durante los registros de la Guardia Civil este fin de semana al semanario El Vallenc. "Es una marca modesta, no una EPSON o una HP, no imprime billetes, o sólo en blanco y negro", se ha burlado el republicano. "Dejen de perseguir impresoras y persigan corruptos", ha zanjado.

Santamaría ha respondido recordando que Junts pel Sí y la CUP no admitieron las peticiones de la oposición catalana sobre consultar al Consell de Garanties, algo que "todo el mundo vio durante diez horas", en respuesta a Rufián. "Al día siguiente vieron la secuela", ha añadido sobre la ley de Transitoriedad. La vicepresidenta se ha mostrado enojada nuevamente con la presidenta de la cámara catalana, Carme Forcadell, a propósito de este suceso. "No se pudo hablar, ni enmendar nada, nadie hizo nada que no le conviniera a Forcadell" ha añadido. "Mató la democracia y usted viene aquí todos los miércoles a darle sepultura", ha dicho, insistiendo después de que "este Congreso le permite sus teatrillos, como enseñar la impresora para fabricarse el referéndum en casa porque es democrático", ha sentenciado.

Rufián ha ironizado entonces que él tenía una papeleta, pero le ha pedido a la vicepresidenta que no lo "detuviera". "Lo confieso, nos vemos en las urnas", ha cerrado.