Pocas horas después de que el director de la Oficina Antifrau, Daniel De Alfonso, levantara la sospecha sobre una presunta reunión con el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, donde éste le habría ofrecido su apoyo en el cargo a cambio "de algunas cosas" para C's, Rivera lo ha desmentido.

Desde Tenerife, donde hoy tenía visita la caravana electoral de la formación naranja, el presidente de C's ha aportado el dato de que la reunión con De Alfonso se produjo en 2013 y el nombramiento como director en 2011. "No le pedí nada más que trabajara con independencia de la política y luchara contra la corrupción y el fraude ", ha agregado Rivera para defenderse sobre las acusaciones hechas durante la Comisión arlamentaria. Según el político catalán, sólo hubo un ecuentro, que tuvo lugar "en calidad de representante del grupo parlamentario", como ha asegurado.

Rivera ha repetido por activa y por pasiva que fue una reunión "ordinaria" en la sede de la OAC y duró alrededor de 30-45 minutos, encuentro que se enmarca en la ronda con sus homólogos del resto de grupos parlamentarios. Asimismo ha querido recordar que Ciudadanos apoyó tanto al actual Director de la OAC, como con el anterior, debido al compromiso de su partido con la corrupción política. "A diferencia de Convergencia, que no creía necesaria esta oficina, nosotros sí", se ha reafirmado en varias ocasiones.

El líder de C's descarta tomar medidas legales hasta el momento. "No soy juez ni fiscal, sólo digo la verdad", ha indicado. Sin embargo, ha pedido que este hecho sea desvinculado del caso en torno al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y la presunta fabricación de pruebas para cargar contra CDC y ERC. El político catalán ha vuelto a demandar que el presidente en funciones, Mariano Rajoy, aclare si estaba al tanto del caso y que cese o haga a Fernández Díaz asumir responsabilidades al respecto. En caso contrario, cree que lo estaría "sosteniendo".