Ni grupo parlamentario, ni las asignaciones y las ventajas de este, ni la facilidad para presentar iniciativas parlamentarias de las que dispone cualquier diputado encuadrado en un grupo. El diputado no adscrito Germà Gordó se verá severamente castigado, en su nueva etapa parlamentaria, a raíz de la reforma del reglamento del año 2005 que impuso contundentes medidas dirigidas a penalizar el transfuguismo.

Gordó ha anunciado hoy que abandona el grupo de JxSí después que tanto el PDeCAT como ERC y la dirección del grupo le han pedido que renuncie a la acta de diputado a raíz de la decisión del TSJC de investigarlo por el caso 3%.

El diputado no adscrito, según el artículo 34 del reglamento, es aquel que abandona su grupo o es expulsado. Un diputado que se encuentre en estas condiciones sólo tendría derecho a pasar al grupo Mixto en caso de que esta situación afectara a todos los miembros de una formación política integrados en una coalición.

En el caso de Gordó, el reglamento se encarga de evitar que el diputado pueda formar grupo parlamentario ni activar el grupo Mixto o ingresar en él si ya está en funcionamiento. Esta restricción impedirá que disponga de acceso a las ayudas económicas y el apoyo logístico con que cuenta cualquier grupo.

Expulsado de los cargos

El Reglamento establece, en el artículo 20, que un diputado que abandona su grupo parlamentario pierde todos los cargos a que tiene en el Parlament. Por lo tanto, aunque Gordó no hubiera abandonado la presidencia de la comisión de justicia, ahora sería expulsado.

El diputado no adscrito tiene los mismos derechos que un diputado individual y tiene derecho a incorporarse a una comisión, que decidirá la Mesa.

La única forma que Gordó podría abandonar este espacio de no adscrito sería volver a incorporarse a su grupo parlamentario, lo cual requeriría el consentimiento de JxSí.

A partir de ahora, la Mesa del Parlament tendrá que decidir dónde ubica dentro del hemiciclo el diputado Gordó, que pasará a ocupar las últimas hileras, y de qué espacio dispondrá en las instalaciones de la Cámara para trabajar.

No obstante, el exconseller conservará, eso sí, su condición de aforado mientras mantenga su acta de diputado.