Mariano Rajoy se reunirá con Pedro Sánchez este miércoles a las 11h en el Congreso de los Diputados. El presidente en funciones se habrá visto el martes antes con el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, y el de Podemos, Pablo Iglesias, pero persiste en su empeño de fiar todas las esperanzas de la investidura al PSOE. El Partido Popular (PP) defiende que si estos no ceden, habrá terceras elecciones y así se lo harán saber al secretario general. Con la estrategia de colocar la presión sobre los socialistas, el PP desafía lo acordado durante el comité federal de este sábado, donde se ratificó el 'no' a Rajoy. 

"Es necesario que haya gobierno en España con la máxima estabilidad posible. Apoyando y no obstaculizando. Sánchez expresó que iría a la oposición con 85 escaños y es una obviedad, pero para que haya oposición debe de haber gobierno", ha incidido el secretario de organización del PP, Fernando Martínez-Maíllo, en la rueda de prensa posterior al comité de dirección del partido. Génova no piensa ceder a un gobierno que no sea el suyo y siguen presionando a Ferraz en esta línea. "No nos rendimos, no hay alternativa. Si mantiene esta posición, si dice 'no' a Rajoy, dice 'sí' a terceras elecciones", ha advertido que le recordarán durante el encuentro.

El diputado por Zamora ha indicado que esta primera reunión sería exploratoria para testar cuáles son los ánimos del PSOE. "Queremos ver qué disponibilidad hay, este es el objetivo de los primeros contactos y hasta dónde están dispuestos a llegar", ha precisado el portavoz. Los populares afirman que entonces entrarían en una segunda fase de negociación para fijar las cesiones sobre propuestas concretas con las fuerzas proclives al entendimiento. Entre ellas no parece que esté el PNV, pero sí C's, según han explicado fuentes populares a este diario.

Génova sigue obviando lo que los barones y el líder del partido rival han expresado ya. "¿No a Rajoy y No a las terceras elecciones? Los dos supuestos no pueden ser al mismo tiempo. Deberán rectificar", ha insistido. La crítica al cónclave de Ferraz ha sido contundente en todo momento y Maíllo ha tratado de reforzar su argumento con los números en mano, publicados por el diario El País este lunes en una encuesta. "La reunión del sábado fue decepcionante, no conectó con millones de españoles, que, según los datos y las encuestas, quieren que cedan y haya gobierno y reformas", ha puntualizado.

El PP no piensa detenerse en el periplo hasta la investidura y ve en Rivera el punto de inflexión que les podría ayudar a entenderse con los socialistas, según han explicado fuentes de la dirección a El Nacional. Se muestran optimistas con la posición que tome el presidente de la formación naranja y creen que podrán seguir avanzando. Ahora bien, harán valer el precedente del pacto de El Abrazo para pinchar a Rivera. "Le damos mucha importancia a la reunión con C's. Le pedimos la misma disposición y la misma actitud y capacidad de diálogo que con el acuerdo de investidura al que llegó con el PSOE", ha espetado el secretario de organización.

Pero la hoja de ruta de Génova es todavía incierta: no saben si se presentarán a la investidura. Esta posibilidad se contemplaría para finales de julio, como ya avanzó Rajoy. Preguntados por si rechazarán el encargo del rey Felipe VI si no hubiese mayoría, Maíllo no ha querido aventurar escenarios futuros. El PP se abre a cualquier ingeniería, incluso a la propuesta de Rivera de una mesa a tres con Ciudadanos, PSOE y PP para que los números le cuadren. "No nos cerramos a nada. Todo dependerá de la actitud del PSOE", ha zanjado.

El Partit Demòcrata Català, en privado

Maíllo no ha querido desvelar si Rajoy y Sánchez han hablado directamente para fijar el encuentro, pero ha indicado que habían gestionado el encuentro los respectivos gabinetes. Los contactos exploratorios de Rajoy acabarán este miércoles, cuando aún no tienen fecha pública para la reunión con el Partido Demócrata Catalán. Según ha sabido El Nacional, la reunión con los catalanes será en privado, previa petición de estos mandatarios, y se anunciará en abierto a posterior. Por su parte, los populares se sienten incómodos porque el PDC se haya declarado "independentista".