El gobierno español insiste y persiste en dialogar con el Govern, pero no encuentra la manera. Esta noche ha vuelto a ser el turno del presidente español, Mariano Rajoy, que ha vuelto a pedir al president de la Generalitat, Carles Puigdemont, que abandone su "estrategia de desafío permanente" porque, asegura, "no conduce a ningún sitio". Esta vez lo ha hecho durante la última reunión del Consejo Europeo del año en Bruselas, delante de periodistas internacionales.

Volviendo a insistir en su disposición a dialogar con Puigdemont, eso sí, sin hablar de referéndum, Rajoy se ha vuelto a reiterar en su idea de no aceptar "de ninguna de las maneras" la consulta porque, según su opinión, "hay muchas cosas que se pueden hablar, construir", pero de votar, nada de nada. "Ni se puede, ni se quiere", ha puesto sobre la mesa.

El presidente español sigue amparándose en el argumento de que "la decisión sobre lo qué es España es del pueblo español y no de una parte del mismo" y, recordando que "las decisiones del Tribunal Constitucional se tienen que cumplir siempre", ha añadido que "el diálogo siempre tiene oído", sin embargo, eso sí, "siempre y cuando uno no ceda en aquello que no tiene que ceder".

"Les animo a que renuncien de una vez porque no conduce a ningún sitio, ni a nada", ha repetido una y otra vez el jefe del ejecutivo estatal, al mismo tiempo que ha garantizado: "El señor Puigdemont sabe, porque se lo he dicho yo, que estoy a su disposición para hablar.