Así han explicado las principales emisoras de radio privadas españolas, este lunes, el juicio por el 9-N y la movilización previa en apoyo de los encausados Artur Mas, Joana Ortega e Irene Rigau.

Cadena Cope

Carlos Herrera dirige y conduce el matinal de esta emisora. En su monólogo editorial, Herrera a las 8, ha entrado en materia con esta perla: “La Fiscalía pide la inhabilitación durante diez años de este tipo [Artur Mas], que es el desastre más grande que ha tenido Catalunya desde Wifredo el Velloso. Una desgracia literal”.

Más adelante explica que “si usted o yo desobedecemos una orden del Tribunal Constitucional, seguramente tenemos que ir a dar explicaciones. Luego ya los jueces verán qué hacen con nosotros”. Sin embargo, “el independentismo catalán está firmemente convencido de que ellos tienen otro marchamo y por lo tanto pueden desobedecer las leyes, las sentencias de los tribunales, y no les pasa nada, porque encarnan a una colectividad”.

Es decir, que si se trata de “usted o yo” los jueces verán que hacen, pero si se trata de “los independentistas”, no es necesario: han desobedecido las leyes, etcétera. Exactamente si desobedecieron o no es lo trata de dilucidar el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya. O Herrera sabe algo más que el resto (y no lo explica) o condena gratis a Mas, Ortega y Rigau y, en general, a “los independentistas”. Quizá considera que no tienen derecho a la presunción de inocencia ni al beneficio de la duda.

Para Herrera, la movilización “es un espectáculo para coaccionar a jueces” en el que “les acompaña Bildu, Comisiones y UGT y, sorpréndanse, Podemos”. Qué susto eh. Dos partidos legales y los dos sindicatos mayoritarios del Estado español.

Habla también de “valiente numerito, típico de régimen dictatorial” y agrega que es “la segunda vez que el nacionalismo catalán avala a un presunto; en el 84 a Pujol, ahora a Mas”.

Otros participantes en el matinal van más allá. Santiago González dice de Mas: “No ha habido en la historia de España un gobernante más zafio en lo conceptual, más torpe en la gestión de los asuntos, más falto de respeto a los hechos y a la verdad, más incompetente en el uso de las palabras, más mediocre, globalmente considerado”. Habla de los voluntarios como “el rebaño que hoy va a acompañarle hasta el tribunal”.

Otro columnista, Luis del Val, retrata a Mas como “ese gran sepulturero que atiende al nombre de Arturo (...) más provinciano que un pueblo de esos sin tren, pequeño como debe ser en Mas el tamaño del cerebro” (...). Se confunde (o no) cuando añade que “ahora será encausado por el turbio 3%”. No hay ningún juicio sobre “el 3%”, ni causa formada, ni Mas ha sido afectado por las investigaciones de la Fiscalía Anticorrupción. Quizá Del Val tiene también información que no revela o ha sido un lapsus. O no, es lo mismo.

La Cope ha entrevistado al ministro de Justicia, Rafael Catalá.

Onda Cero

Carlos Alsina es el director y presentador de Más de Uno. En el arranque del programa, a las seis de la mañana, cuenta que la movilización de Barcelona pasará “por lugares emblemáticos del independentismo como ‘el Cementerio de las Moreras’ (sic) o ‘el mercado del Born’” (pronunciado con R a la americana) y llama “estos mártires” a los tres procesados.

En un primer resumen de lo que ocurre improvisa y habla de “gobernantes saltándose la ley a sabiendas”, a continuación titubea y añade “presuntamente, claro”. Claro, claro, claro.

Se conoce que es un lapsus porque, más tarde, en su monólogo editorial, lee: “les recuerdo que lo único que se juzga aquí es la actuación de los procesados en la celebración de la consulta independentista del (…) 9-N. Si desobedecieron a sabiendas la suspensión decidida por el TC o no lo hicieron. Se juzga eso y nada más”.

Antes, para referirse a la manifestación, usa estos términos: “función”, “teatrillo”, “matiné”, “ficción dramática”, “fingimiento sobreactuado”, “comedia con aspiraciones épicas”, “entremés”, “romería”, “paseo mañanero” y “cabalgata”. Todos en dos frases.

En un simpático momento del monólogo da paso al audio de la escena de “Los Diez Mandamientos” en que la madre dice a su bebé Moisés: “tú serás la gloria de tu pueblo”, etcétera, en alusión a Artur Mas.

La organización de la protesta (por inscripción) le resulta sospechosa y acusa al movimiento independentista de comportarse “fiscalizando al personal hasta el infinito y más allá”.

En el párrafo final se hace un lío y mezcla las churras de este juicio con las merinas de la investidura fallida de Mas: “Conviene recordar, en fin, que este president al que Convergència hoy arropa en la calle y al que Esquerra arropa bastante menos, no está fuera de la presidencia porque fuera procesado y decidiera apartarse. No. Está fuera de la presidencia porque el socio escogido por Junts pel Sí, la CUP, exigió su cabeza —Salomé— y ésta le fue entregada”. Segunda referencia bíblica de la mañana.

El columnista de guardia este lunes en Onda Cero es Fernando Onega, especialista en ponerse de modo que no se sepa si sube o baja. También este lunes: “Reunir mucha gente para mostrar músculo independentista, aprovechar la declaración ante el tribunal para lanzar el mensaje de que consultar a la gente es legal, dar libre a los funcionarios para aparentar que la administración pública está con sus libertadores, forzar a los líderes a un movimiento de solidaridad con los insumisos y crear un ambiente de opresión del Estado sobre inocentes conspiradores. ¿Puede esto acelerar el proceso de desconexión? Hay motivos para responder que sí, y muchos, y motivos para responder que es indiferente”.

Cadena SER

En su matinal Hoy por Hoy, Pepa Bueno editorializa en otra línea: “Que acabe en los tribunales un problema político es un fracaso para todos y se equivoca enormemente quien piense sacar algún rédito. Ni los tribunales harán nunca el trabajo que corresponde a la política, ni la calle sirve de escudo humano para saltarse la legalidad. Porque la Ley es y sigue siendo –quizá en este momento más que nunca– condición imprescindible para la democracia”.

El resto de los columnistas matinales de la SER comentan la noticia en la misma actitud Tercera Vía.

Iñaki Gabilondo recuerda una conversación muy reciente “con la cúpula del independentismo”: “lo que más me impresionó fue la naturalidad con la que asumían que el topetazo es inevitable. De hecho, viven ya en la ruptura. Ya no tienen nada que negociar. Ni siquiera se sabría sobre qué negociar. Parece que el Gobierno de Madrid está en las mismas. Al soberanismo, el juicio a Mas le parece un gran spot en la campaña de alistamiento de nuevos voluntarios”.

Más o menos lo mismo dice José María Izquierdo: “Unos y otros deben entender que es urgente el diálogo y la negociación” para salir de “este despropósito de enfrentamiento”.