Junts ha situado desde el primer día de campaña la abstención como el enemigo a abatir, pero a medida que las encuestas apuntan a un empate a tres e, incluso, la posibilidad de que la lista de Laura Borràs consiga la victoria el 14-F, la apelación de los candidatos se dirige a reclamar esta victoria, "ganar bien", en palabras de la presidenciable. "Tenemos que ir a quedar primeros porque será la manera más clara de hacer entender aquello que queremos hacer", ha reclamado el cabeza de lista, Carles Puigdemont, que ha situado al PSC como "la otra alternativa y el único obstáculo" para que Borràs sea presidenta.
En el acto de cierre de campaña de Lleida, una circunscripción donde Junts lucha por retener a los seis diputados que obtuvo el 27-S, Puigdemont ha cargado con contundencia contra los socialistas, a los cuales ha calificado de "albaceas de este rey ladrón al que protegen y ayudaron a huir" y "el partido del régimen, el partido mimado de los grandes grupos de comunicación, de los grandes intereses del palco del Bernabéu".
Candidato de segunda mano
En videoconferencia desde Waterloo, ha advertido que Illa es "un candidato de segunda mano", que ha fracasado como ministro de Sanidad a ojos de toda Europa, y que en estos comicios ha intercambiado los papeles con Ciudadanos. "Actúan con aquel compromiso sagrado de que todo aquello que el 155 unió, las urnas no lo separará. Aunque hagan resultados diferentes, las urnas no los separarán si tienen que hacer un 155 u otros 155", ha ironizado.
También Borràs ha sentenciado al tomar la palabra que "el efecto Illa ha pinchado como su autobús de campaña y necesita ir al taller a que lo reparen".
Alternativa al tripartito
En su intervención, la presidenciable ha evocado una de las imágenes más impactantes que la suspensión de la autonomía dejó en Lleida con la retirada de las obras de Sixena en diciembre del 2017. "Con nocturnidad y a traición, el 155 cogía una dimensión patrimonial y eran expoliadas por orden del ministro, que usurpaba las funciones de conseller de Cultura", ha denunciado.
Laura Borràs ha reclamado a Lleida el voto para "ganar bien" / ACN
Borràs ha apelado al voto útil y ha advertido que el 14 de febrero hay dos opciones: "un gobierno tripartito, este retorno de producto defectuoso, que convertiría a la Generalitat en una sucursal de la Moncloa; el modelo que ya practica en Madrid el PSOE con sus socios y como practica en Barcelona; somos la única garantía de que no habrá este gobierno. O un gobierno independentista encabezado por JxCat".
Sànchez: "Evitar mayorías extrañas"
También el secretario general de Junts, Jordi Sànchez, ha llamado a votar "sin miedo" el 14-F para dar a Junts la victoria que apuntan ahora las encuestas cuando hace unos meses se daba esta fuerza por desaparecida. "Somos el compromiso de que este país no repetirá mayorías extrañas ni ajenas a la voluntad soberanista, lo que nos tiene que permitir ver el ejercicio pleno del derecho a la autodeterminación. Sin Junts nada está garantizado, con juntos todo es posible", ha asegurado.
Sànchez, que ha tenido que abandonar el acto cuando apenas empezaba y entre gritos de libertad para llegar a la hora a Lledoners, ha apelado al espíritu de JxSí, la candidatura con que el independentismo concurrió a las elecciones del 27-S del 2015, y ha ofrecido "una voluntad de liderar un proyecto fuerte" y de fuerzas independentistas.
El cabeza de lista por Lleida, Ramon Tremosa, ha advertido que "el Estado español ha abandonado a los catalanes en general y a los leridanos en particular", en un acto que ha sido presentado por el que fue cabeza de lista a las elecciones del 27-S y el 21-D por Lleida, Josep Maria Forné, que esta vez no repetirá en las listas.
En la imagen principal, Puigdemont, en la pantalla, saluda a Laura Borràs en el mitin que JxCat ha ofrecido esta noche en Lleida / Efe