Concejales sardos y decenas de alcaldes han recibido con una ovación al presidente Carles Puigdemont, que ha participado este domingo en un encuentro en la ciudad de Oristán con un grupo de alcaldes independentistas de la isla, en uno de sus últimos actos antes de partir el lunes hacia Bruselas para seguir con el trabajo de eurodiputado. En este sentido, tal como recoge la ACN, durante la conferencia ha comprometido la solidaridad de Catalunya con el pueblo sardo cuando la necesite.

Puigdemont ha admitido que la realidad de las dos naciones es diferente, pero ha dicho que pueden compartir el camino, junto con otras naciones sin estado de Europa, para colaborar a crear una Unión Europea más próxima y comprensiva con los pueblos que la conforman.

En un acto con más de un centenar de simpatizantes independentistas hecho en catalán, sardo e italiano, Puigdemont se ha solidarizado con el movimiento independentista sardo y le ha agradecido el apoyo desde el 2017 y especialmente los últimos tres días, cuando fue arrestado en el Alguer. La misma agencia destaca que ha instado a la Unión Europea a admitir la diversidad de pueblos que la forman, así como al reconocimiento de sus realidades nacionales, culturales y lingüísticas. Entre bastantes aplausos, también al expresidente de la ANC y secretario general de Junts, Jordi Sànchez, Puigdemont ha dicho que "si nunca Cerdeña necesita la solidaridad de Catalunya, la tendréis".

El acto lo ha organizado la Corona Logu, una organización de cargos electos independentistas sardos, como la AMI catalana, y que toma el nombre de una antigua institución isleña que englobaba cargos políticos y judiciales. Otras entidades independentistas han elogiado el proceso independentista catalán y lo han tomado como modelo de lucha soberanista pacífica.

Puigdemont comparecerá personalmente

Puigdemont compareció el sábado ante los medios, en catalán, castellano, inglés e italiano, y afirmó que el Gobierno solamente "quiere dialogar con los que le dan apoyo parlamentario", al mismo tiempo que lamentó que haya "una parte independentista, no menor, que no está en los planes de Pedro Sánchez".

Además, aseguró que seguirá viajando por Europa" y que asistirá personalmente a la vista fijada en el Tribunal de Apelación de Sassari del 4 de octubre, en el cual se determinará si existen razones o no para su entrega a España, después de que fuentes italianas próximas al caso hayan explicado que si no estuviera físicamente presente en territorio italiano, el tribunal establecería "no lugar a proceder" y acabaría el procedimiento judicial.

Detenido el jueves

El líder independentista fue detenido el jueves en el aeropuerto de Alguer, por una orden del Tribunal Supremo español, aunque salió de la prisión de Bancali en la ciudad de Sassari el viernes, cuando el Tribunal de Apelación decidió que no le iba a imponer medidas cautelares de ningún tipo ni restricciones de movimiento.

Este sábado participó en un acontecimiento de folclore catalán en Alguer, organizado por Adifolk, y se reunió con el presidente de Catalunya, Pere Aragonès, y el vicepresidente, Jordi Puigneró, que viajaron hasta Cerdeña para mostrarle su apoyo.

Aragonès afirmó en una declaración a los medios que "la represión contra el movimiento independentista continúa, que es más necesaria que nunca una amnistía" y que hay que reconocer "el derecho el pueblo catalán a decidir su futuro" y el "ejercicio del derecho a autodeterminación con un referéndum de independencia", si bien no se pronunció sobre si este arresto influirá en la mesa de diálogo en curso entre el Estado español y Catalunya.

 

 

Imagen principal: el presidente Carles Puigdemont durante el encuentro con líderes independentistas sardos / Twitter Jordi Sànchez @jordisanchezp