Los diputados de Junts en Bruselas han pedido explicaciones a la Comisión Europea sobre una operación del Gobierno español el año 2017 para evitar "in extremis" que la UE actuara como mediadora en la tensión entre el Estado y Catalunya en los días posteriores al referéndum del 1-O.
Según publicó la periodista Carmen Morodo en La Razón el pasado día 21, la semana posterior al referéndum, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, incluyó en el discurso que tenía que leer ante la Eurocámara el 4 de octubre esta propuesta de mediación.
Pero Juncker se tuvo que marchar a la India en un viaje de último momento y correspondió al comisario Frans Timmermans leer el texto que había preparado.
Antes de aquel pleno, sin embargo, el eurodiputado del PP, Esteban González Pons, alertó al gobierno de Mariano Rajoy, el cual envió el secretario de relaciones con la UE, Jorge de Toledo, a Bruselas para evitar que se planteara esta propuesta de mano tendida, que habría podido cambiar radicalmente los acontecimientos que se sucedieron después del referéndum.
Finalmente, los representantes españoles consiguieron convencer a Timmermans de que no leyera aquel discurso y la propuesta se frenó in extremis, según explica La Razón que avanza que ahora, después que han prosperado los indultos, "Europa podría volver a considerar reanudar la oferta de diálogo".
Contactos de Timmermans
Ante esta información, los diputados de Junts, Carles Puigdemont, Toni Comín i Clara Ponsatí, han preguntado a la Comisión por escrito si Timmermans o alguien de su equipo comunicaron con Toledo los días antes del plenario.
Preguntan si había un borrador previo a lo que leyó el 4 de octubre del 2017 ante el pleno, y piden que, si es así, se haga público.
Y finalmente pregunta si la Comisión puede confirmar o rechazar la información que la UE estaba dispuesta a ofrecer mediación en octubre del 2017 y fue interferido por el Gobierno español.
Precisamente la intervención de la UE era una de las cartas en que confiaba el independentismo en los días anteriores y posteriores al referéndum.
En la imagen principal, Carles Puigdemont en el Parlamento Europeo