La consellera de Presidència y portavoz del Govern, Neus Munté, ha asegurado que el president Carles Puigdemont no tenía intención de entrevistarse con el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ya que “el objetivo del viaje del president a Bruselas no era encontrarse con las instituciones europeas”. Munté ha señalado que se informó a la CE de la visita del president a la capital belga “dentro de la normalidad”, sin pedir ninguna entrevista, aunque desde la misma Comisión se informó de que “por cuestiones de agenda no se podía producir ningún encuentro”.

En la rueda de prensa posterior a la reunión de Govern, Munté ha asegurado que el viaje a Bélgica “respondía a la invitación del presidente de Flandes”, y que por lo tanto se “cumplieron” los objetivos de la visita. Dentro de la “corrección” se comunicó la estancia del Puigdemont, cosa que se hace “siempre que el president de la Generalitat visita Bruselas”. Según Munté, por parte de la CE “se agradeció la comunicación”, añadiendo que Juncker no tenía disponibilidad aquellos días para encontrarse con Puigdemont.

Preparación de la cumbre

Asimismo, Munté ha asegurado que la reunión de Govern de esta mañana se ha dedicado a la preparación de la cumbre de esta tarde para responder a la suspensión parcial de la ley de pobreza energética y “proteger a las personas más vulnerables”. De hecho, el Govern ha preparado una serie de medidas concretas que planteará en una cumbre que “quiere encontrar la fórmula para aplicar lo que el TC” ha “suspendido”. La intención es articular una respuesta de país ante la suspensión parcial, en especial con respecto al derecho de la vivienda.

Finalmente, en relación a la convocatoria de elecciones españolas anticipadas para el 26-J, Munté se ha referido a ellas como “fracaso de la política española sin precedentes” al no haberse llegado a un acuerdo para formar gobierno y evitar la repetición de las elecciones.