Carles Puigdemont ha recogido el guante de Jordi Pujol, y comparte la idea sobre evitar "la candidez" a la hora de negociar con Madrid de cara a una investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno. El president en el exilio ha catalogado de "interesantísima" la entrevista al expresident de la Generalitat, Jordi Pujol, en ElNacional.cat, con quien comparte el parecer y considera que "tiene razón". Precisamente, por esta consigna es que Puigdemont, a través de un tuit, también ha dado la razón al secretario general de Junts, Jordi Turull, en su crítica hacia el secretario general del PSC, Salvador Illa, al considerar que "no es un interlocutor válido" para generar confianza entre España y Catalunya.

Puigdemont ha asegurado que Turull hace bien en recordar las razones por las cuales no fiarse de Illa. El secretario general de Junts, también en su cuenta de Twitter, ha criticado el encuentro entre Salvador Illa y Pedro Sánchez este miércoles en Madrid, donde se aseguró que se intensificará el contacto entre ambos de cara a la investidura. Turull considera que el hecho de dar protagonismo a quien "engañó a Junts el día de antes del pacto de la vergüenza en Barcelona", que impidió que Xavier Trias se convirtiera en el nuevo alcalde de la ciudad, "es una manera muy extraña de demostrarnos que son de fiar".

Los consejos de Jordi Pujol

En su entrevista con Elnacional.cat Jordi Pujol afirma que Catalunya no debe caer en la "candidez" en cuanto a las negociaciones que los partidos independentistas mantienen ahora con el PSOE y Sumar para la investidura de Pedro Sánchez. El expresident advierte que "hay que ser, en ciertos aspectos, a veces, un poco exigentes, tenemos que ser capaces de ser exigentes". Pujol puntualizaba que esto "no reclama recurrir a ningún tipo de violencia", es más, considera, que siempre se ha mostrado "contrario", pero sí "reclama que el conjunto de Cataluña y las fuerzas políticas catalanas sean capaces de defender", sobre todo, "la identidad del país".

Sobre qué es lo que se tiene que pedir, Pujol admite que la reflexión "no es fácil", pero en todo caso aconseja que lo que se acabe haciendo sea "una cosa que pueda perdurar a través de la historia", algo que de aquí a treinta años "no se pueda decir, esto ya no sirve". El expresident de la Generalitat ha pedido, así, que lo que se haga tenga "sentido de permanencia, de duración".