Catorce meses después de estallar públicamente las corruptelas del caso Koldo, el PSOE ha expulsado al exministro de Transportes y ex número tres del partido, José Luis Ábalos, que desde febrero de 2024 ya fue expulsado del grupo parlamentario socialista en el Congreso al negarse a entregar su acta y es diputado del grupo mixto. Se resuelve así el expediente sancionador que se le abrió a principios del año pasado, con una expulsión que aprobará la ejecutiva del partido reunida este mediodía en Ferraz. Desde el 27 de febrero de 2024, Ábalos tenía suspendida cautelarmente la militancia.
El Partido Socialista ha confirmado su expulsión definitiva este lunes en un comunicado, en medio de la tormenta política, después de saberse que el sucesor de Ábalos como secretario de Organización, Santos Cerdán, también estaba presuntamente implicado en las corruptelas de Koldo García para beneficiarse con comisiones ilegales de la compraventa de mascarillas durante la pandemia de la Covid-19. El presidente del Gobierno y líder del PSOE, Pedro Sánchez, que afirma que no sabía nada y confiaba en Cerdán hasta el último momento, ha anunciado hoy mismo también una reestructuración temporal de la cúpula del partido hasta el comité federal del 5 de julio en Sevilla.
Se pone fin de este modo a casi 45 años de militancia de José Luis Ábalos en el Partido Socialista, formación a la que ha estado vinculado toda una vida en todo tipo de cargos, en su València natal y en Madrid. Desde que empezó como militante de base y asesor en segunda línea, y luego se convirtió en concejal en el Ayuntamiento de València entre 1999 y 2009. Más tarde, sería diputado en el Congreso por València desde 2009 y hasta la actualidad. Además de cargos institucionales, el de Torrent también fue líder de los socialistas de València entre 2012 y 2017. Pero su punto álgido llegó con la llegada de Pedro Sánchez a la Secretaría General de la formación, convirtiéndolo en su mano derecha.
Ábalos fue fiel a Sánchez incluso en sus peores momentos, cuando fue defenestrado del liderazgo del partido por la vieja guardia en 2016 al negarse a facilitar la investidura del PP de Mariano Rajoy. Cuando Sánchez recupera el liderazgo del partido ganando las primarias a Susana Díaz y Patxi López en 2017, sitúa a Ábalos como secretario de Organización, el todopoderoso número tres de la formación, y temporalmente como portavoz del grupo parlamentario en el Congreso. En el momento en que el líder socialista llega a la presidencia del Gobierno con la moción de censura a Rajoy en 2018, sitúa a Ábalos también como ministro de Fomento —de Transportes a partir de 2020—, una influyente cartera por el descomunal presupuesto que maneja.
Destituido de los altos cargos sin ninguna explicación en 2021
Sin embargo, la confianza depositada en Ábalos se pierde en algún momento y en julio del 2021, Pedro Sánchez anuncia una reestructuración de su ejecutivo y destituye a Ábalos sin dar explicaciones, para situar a la catalana Raquel Sánchez en su lugar al frente del Ministerio de Transportes. También le quita el cargo orgánico como número tres del partido y sitúa al ahora también destituido Santos Cerdán. Fuera del Gobierno, Ábalos continuó como diputado y en las siguientes elecciones generales, las de 2023, fue reelegido como representante por València en el Congreso.
Estalla el caso Koldo en 2024
Todo cambia en febrero de 2024, cuando la mano derecha de Ábalos, Koldo García, es detenido por miembros de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, acusado del presunto cobro de comisiones ilegales en la compraventa de mascarillas durante la pandemia. En medio de una asfixiante presión interna para que dimita y entregue su acta de diputado, Ábalos lo rechaza, por lo que es expulsado del grupo socialista y se integra en el grupo mixto, alegando que es inocente y que quiere "defender su honor". A lo largo de este año, han ido saliendo conversaciones grabadas por los investigadores de la UCO que vinculan a Ábalos a estas irregularidades, y que ahora han salpicado también a Santos Cerdán. Desde noviembre, Ábalos está siendo investigado por el Tribunal Supremo, al ver indicios de malversación, tráfico de influenzas y organización criminal.