Más de un centenar de manifestantes se acumulan desde media mañana en el exterior del Congreso de los Diputados protestando en contra de la amnistía y coincidiendo con la primera jornada de la sesión de investidura de Pedro Sánchez. Insultos contra el candidato a la reelección y Carles Puigdemont conforman la banda sonora de esta movilización. Los manifestantes se sitúan delante del cordón policial que impide entrar en la zona acordonada por la policía, a la que no se puede acceder sin autorización. A pesar del enfado y los cánticos —que son los mismos que se reproducen todas las noches en la sede del PSOE, en la calle Ferraz— no se han registrado incidentes y la concentración transcurre sin problemas.

Un mar de banderas españolas, algunas franquistas y otros carlistas, y gritos en contra de la prensa pueblan uno de los dos puntos donde hay concentración. En el cruce entre la plaza Neptuno y la Carrera de San Jerónimo es donde hay más gente, mientras que en el otro extremo, en el cruce entre San Jerónimo y calle Cedaceros, hay menos actividad. Los dos puntos se ubican a 300 metros de los icónicos leones del Congreso de los Diputados, y alcanzado el mediodía no había obligado a cortar ninguna vía madrileña, como el paseo del Prado.

 

A primera hora se han visto sobre todo a personas mayores, y a medida que ha avanzado la mañana, la composición de la manifestación ha ido mutando con la llegada de estudiantes y gente joven. De forma cíclica, por la plaza Neptuno circulan buses y furgonetas de la organización Hazteoir, serigrafiados con fotografías de Pedro Sánchez y Carles Puigdemont, a quienes tildan de traidores. De hecho, uno de los vehículos lleva impresa una imagen del presidente en funciones vestido como si fuera Adolf Hitler, y cada vez que pasa exalta los ánimos de los manifestantes.

Durante toda la mañana se ha observado mucho rechazo a los profesionales de la prensa que están cubriendo la manifestación. En uno de los momentos más tensos, un grupo de manifestantes ha increpado, insultado y expulsado a un equipo de TV3 que estaba trabajando en la zona. "¡Fuera, fuera, fuera!", les han gritado con una actitud desafiante e intolerante.

 

Despliegue policial extraordinario

En el Congreso de los Diputados un despliegue policial extraordinario ha protegido el normal funcionamiento de la primera jornada de la investidura. Según datos del Ministerio del Interior, 1.600 agentes de la policía nacional custodian desde primera hora de la mañana los alrededores de la cámara baja. Hay dos cordones policiales que tan solo se puede superar con una autorización expresa para la ocasión. El esfuerzo policial es similar al que realiza la policía cuando el Real Madrid juega un partido de Champions League en el estadio Santiago Bernabéu y las autoridades lo consideran un encuentro de alto riesgo, como el de hace unos días contra el Braga portugués.