La premio Nobel de Paz Jody Williams ha denunciado que la causa contra los líderes independentistas en el Tribunal Supremo pone en peligro derechos humanos. Williams ha asistido este martes a la sesión del juicio del 1-O y ha alertado de que se están "criminalizando" manifestaciones "pacíficas" y el derecho a la libertad de expresión.

La norteamericana también ha defendido el "derecho de la gente a dar su opinión sobre su futuro" y ha dicho que no aceptarlo es "matar un derecho humano". Williams ha criticado el "miedo" del estado español al diálogo con Catalunya y ha dicho que la forma de responder a un "problema político" no puede ser a través de la justicia. "Me parece una farsa", ha dicho.

La premio Nobel de la Paz fue propuesta como testigo por la defensa de Jordi Cuixart pero el tribunal no la aceptó. Sobre la vista oral, ha denunciado que agentes de la policía española están "mintiendo" y ha lamentado que el tribunal no permita contrastar con vídeos sus testimonios durante los interrogatorios.

Williams fue premiada con el Nobel de la Paz en 1997 por su lucha contra las minas antipersonales. Es presidenta de la organización Nobel Women's Initiative formada por seis mujeres Nobel de la Paz. Firmó el manifiesto 'Let Catalan Votes'. Por este motivo, la defensa de Jordi Cuixart la pidió como testigo en el juicio del 1-O pero el tribunal la rechazó y también es uno de los motivos por los cuales ahora Williams ha querido asistir al juicio.

En una atención a los medios en las puertas del Supremo, Williams ha cuestionado que se pueda hablar de "justicia" y ha dicho que siente "tristeza" por la situación. "Creo que la cosa más importante de un gobierno es promover y dar apoyo a los derechos humanos de su gente", ha defendido, y ha acusado al Estado español de estar más preocupado por la "unidad" territorial.

La premio Nobel de la Paz ha alertado del peligro para el resto de ciudadanos del Estado que se pongan en cuestión derechos fundamentales como el de manifestación o de expresión y ha avisado de que es una tendencia que se está dando en el resto del mundo. Williams ha citado el caso de México, Honduras o Ucrania.

Williams también ha criticado la prisión preventiva de los acusados por rebelión en el Supremo y ha lamentado que encarcelándoles, el tribunal ya los presenta como culpables. La norteamericana no presenció el 1-O pero ha explicado que ha seguido de cerca el procés.