El PP de Alberto Núñez Feijóo sigue liderando las encuestas, que lo sitúan como ganador de unas elecciones generales españolas y cada vez más lejos del PSOE de Pedro Sánchez, que se ha enfocado en las últimas semanas a intentar hacer llegar a la población la importancia de las medidas que se toman desde la Moncloa, pero de momento sin demasiado éxito. Con todo, estos resultados del PP, en este caso en una encuesta de El País y la Cadena SER, se deben especialmente a la primera gran guerra interna dentro de Vox, entre el partido y quien era una de sus grandes estrellas, Macarena Olona. Los ultras, que habían llegado a hacer sombra al PP en sus horas más bajas con Pablo Casado al frente, desde la llegada de Feijóo (y también desde su porrazo en Andalucía) han ido perdiendo apoyos y podrían no haber tocado fondo todavía.

Según el sondeo del mes de octubre de estos medios, el PP conseguiría el 29,4% de los votos y 124 escaños, 36 más que las que obtuvo el 10 de noviembre de 2019, ya hace casi tres años. Con respecto al barómetro de hace un mes, los populares suben 1,5 puntos, hecho que demuestra que su tendencia ascendente sigue y que, al contrario de lo que se defiende desde las filas socialistas, el efecto Feijóo todavía no se ha acabado, seis meses después de su llegada a la presidencia del partido, con la cual cambiaron sus perspectivas electorales. Hay que tener en cuenta que, según los resultados de la encuesta, es el partido que cuenta con más fidelidad de voto (80%), pero también recoge otros partidos: un 7,5% de los socialistas.

Más País ya supera a Ciudadanos

Mientras el PP crece, en el PSOE crece la preocupación, no solo por la diferencia con respecto al otro gran partido, sino porque solamente 6 de cada 10 de sus votantes irán a votar seguro, una cifra muy baja. Ahora mismo, conseguirían un 26,3% de los votos, según esta encuesta, una cifra que se traduce en 103 escaños: 17 menos que los 120 del 10-N que les permitió formar un gobierno de coalición con Unidas Podemos con el apoyo del resto de socios parlamentarios. Con respecto a los morados, aunque siguen obteniendo menos votos y escaños que hace tres años y siguen lejos de la tercera posición, en la que se ha situado Vox, en los últimos meses han mantenido una tendencia ascendente que los sitúa muy cerca del 13% de los apoyos (12,4%) y 33 diputados, dos menos de los que tiene ahora en el Congreso.

La crisis interna de Vox, un partido caracterizado por su disciplina y pocas disputas entre sus miembros, les ha pasado factura. Si bien en los últimos meses la llegada de Feijóo había frenado su ascenso meteórico durante la etapa de Casado, la caída libre no se ha frenado, sino todo al contrario. En solo un mes, comparado con el último sondeo de estos medios, pierde 8 décimas (hasta el 14,2%) y pasaría de los 52 diputados actuales a solo 44. Quien tampoco remonta es Ciudadanos, a la espera de los posibles cambios en la dirección del partido. Los naranjas rozan la desaparición con solo un 2,2% de intención de voto, hecho que podría provocar que se quedaran sin escaños en el Congreso. De hecho, hoy por hoy, el Más País de Íñigo Errejon ya los supera y mantendría a sus tres diputados.