Las acusaciones de Isabel Díaz Ayuso han tenido una respuesta instantánea de la dirección del Partido Popular. La ha dado el secretario general de la formación, Teodoro García Egea, que ha anunciado la apertura de un expediente informativo a la presidenta de la Comunidad de Madrid y que se reservan las "acciones oportunas" a posteriori, sin cerrar la puerta a la suspensión de militancia o expulsión. La mano derecha de Pablo Casado ha explicado que el pasado septiembre recibieron las informaciones sobre los supuestos contratos irregulares, que pidieron a Ayuso que lo aclarara y que no obtuvieron respuesta.

A la una y media, ha sido Ayuso quien ha comparecido desde la Puerta del Sol para denunciar que la dirección estatal del PP "había fabricado presuntas corrupciones" para intentar desprestigiarla "política y personalmente" y apartarla de la carrera por la presidencia del PP de Madrid. Se refería a las informaciones aparecidas hoy, que mezclaban un supuesto contrato irregular para la compra de mascarillas, a un empresario vinculado al hermano de Ayuso, con el espionaje a la propia presidenta de la Comunidad de Madrid y su familia. "Es muy doloroso que dirigentes de mi partido, en lugar de darte apoyo, sean los que te quieren destruir", ha llegado a decir.

Una hora y media más tarde, ha comparecido Teodoro García Egea desde la sede de Génova. Y lo ha hecho para anunciar las primeras medidas. Ha explicado que los servicios jurídicos del partido ya lo estudian, que han acordado abrirle un expediente informativo "para culminar las averiguaciones" y que "se reservan las acciones oportunas" una vez tengan las conclusiones. Cuando se le ha preguntado si contemplan la expulsión, ha dejado el interrogante en el aire.

 

Los estatutos del PP prevén que es una infracción muy grave la "manifiesta deslealtad al partido, a sus órganos de gobierno y representación". Las infracciones muy graves están castigadas con la suspensión de militancia durante un plazo de tiempo de entre cuatro y seis años, con la inhabilitación para representar al partido, o con la expulsión del partido. Esta última opción está pensada para casos de corrupción o transfuguismo.

La dirección estatal ha expuesto su versión de los hechos. El pasado mes de septiembre, después de vacaciones, Génova recibió "información sobre un supuesto cobro de comisiones" a la Comunidad de Madrid, una información que "también estaba en manos de la oposición y de determinados medios". En este contexto, Casado convocó a Ayuso a su despacho para informarla de los hechos y, "desde la absoluta confianza", emplazarla a aportar más información sobre el caso para aclararlo. "Hasta el día de hoy, ha sido en vano. No hemos recibido ninguna aclaración", ha lamentado la mano derecha de Pablo Casado en el partido. También se abrió una investigación interna, como se hace "en todos los casos".

Por otra parte, García Egea también ha desmentido "de forma tajante" que el Partido Popular haya contactado a ninguna agencia de detectives, como aseguraban las informaciones publicadas, ni que se haya elaborado "ningún dosier" sobre Ayuso, como ha denunciado la presidenta madrileña. Si alguien lo hubiera hecho, ha asegurado, él mismo le habría cesado "de inmediato".

"Desde que recibimos la información a la vuelta del verano, y se la consulta, en lugar de respuesta clara, lo único que recibe esta dirección es una campaña masiva de ataques y calumnias como las de hoy", ha criticado al secretario general del PP, que ha calificado de "injustas" y "casi delictivas" las afirmaciones de Isabel Díaz Ayuso.

García Egea lo ha atribuido todo a las diferencias sobre la fecha de celebración del congreso del PP de Madrid. Ha utilizado términos similares a los de la propia Ayuso: "Nunca imaginé que se atacara de forma tan cruel e injusta a la dirección de un partido que se lo ha dado todo". Y ha remachado: "Esta dirección no puede aceptar que nadie utilice las siglas del PP para sortear sus problemas".