El dicho de 'los enemigos de mis enemigos son mis amigos' se materializa a la política municipal de Montehermoso, Extremadura. En este municipio, los cinco concejales de Unidas Podemos y los dos de Vox han cerrado un trato fundamentado en su animadversión por el PSOE de la localidad. La alcaldía está en manos de Rosa Isabel Garrido, de Izquierda Unida, sin embargo, se encuentran en minoría. Su mala relación con los socialistas ha llevado al ejecutivo de Podem ha llegado a un polémico acuerdo con la extrema derecha para mantener el gobierno municipal.

Para evitar una moción de censura del PSOE, Garrido ha alargado la mano a Vox, traspasando fronteras ideológicas y levantando polvareda. En el último Pleno Municipal se ha aprobado que los dos concejales de Vox pasen a tener la condición de liberados a tiempos parciales y se integrarán así en el equipo de gobierno de Unidas Podemos. Concretamente, los dos concejales de la extrema derecha asumirán competencias de Seguridad Ciudadana y Gestión Forestal y Caminos, según informa El Mundo.

Unidas por Montehermoso ha justificado este acuerdo afirmando que el acuerdo natural de su formación con los socialistas ha sido imposible. "Dadas las prácticas de oposición feroz del PSOE local, que incluso perjudican el interés de los vecinos, decidimos aumentar nuestros apoyos al pleno municipal, para conseguir sacar nuestras medidas de forma democrática y no exclusivamente a través de decretos de alcaldía", justifican desde el Ejecutivo.

Represalias de las respectivas formaciones

Por parte de Unidas Podemos se ha reclamado a los concejales de su formación en Montehermoso que hagan marcha atrás en su acuerdo con Vox. La secretaría general de Unidas Podemos en Extremadura, Irene de Miguel, ha asegurado que este "no es el camino" y ha lamentado la situación. El coordinador de IU Extremadura, Joaquín Macías, ha declarado a l'ABC: "Hay líneas rojas que no se pueden cruzar". Además, ha subrayado que su formación no acepta "ningún pacto político" con Vox.

Por el lado de Vox, el Comité Ejecutivo Provincial del partido de extrema derecha ha pedido al Comité de Garantías de lo mismo que se inicie una expediente de expulsión para los dos concejales que han aceptado el acuerdo. Los dos no habrían contado con el beneplácito del partido para sacar adelante este acuerdo. Es decir, que se pueden enfrentar a una severa sanción para actuar de forma unilateral.