Este martes por la tarde arranca el primer pleno ordinario desde que la Junta Electoral declaró vacante el escaño del president de la Generalitat. Los efectos del temporal Glòria serán una broma comparado con lo que puede vivirse en el interior del Parlament. Ciudadanos y el Partido Popular ya tienen preparado el armamento para cargar contra el propio Quim Torra y contra el presidente de la cámara, Roger Torrent y el resto de miembros de la Mesa.

A partir de las tres de la tarde se inician varios debates que acabarán con votación. El primero, una proposición de ley de modificación de la renta mínima garantizada. El siguiente, la aprobación del presupuesto del Parlament. Al día siguiente volverá a haber bronca, ya que por la mañana se celebra la habitual sesión de control al president, a quien Cs y el PP consideran despojado de su cargo.

La semana pasada, todos los grupos menos Cs y PP avalaron el informe de los letrados según el cual "la Junta Electoral no es competente para acordar la destitución del diputado Torra" y "la condición de diputado no es necesaria para mantener la de president de la Generalitat". Las tres fuerzas independentistas -JxCat, ERC y la CUP- vieron reforzada su posición gracias al apoyo de comunes y PSC, que consideran estéril la resolución de la JEC hasta que no haya un pronunciamiento firme y definitivo del Tribunal Supremo sobre el fondo de la cuestión. Es decir, sobre si la sentencia del TSJC -el tribunal que juzgó al president de la Generalitat y lo condenó a un año y medio de inhabilitación- es adecuada o no.

Desobediencia, prevaricación y usurpación de funciones

Cs y PP, sin embargo, siguen con su cruzada y afirman que Torra es ya expresident y exdiputado. Y que como tal, no puede ejercer su derecho al voto como parlamentario. En este sentido, amenazan de querellas si la Mesa del Parlament, con Torrent al frente, no le impide que pueda pulsar el botón para votar. De hecho, ya la semana pasada les advirtieron a través de un escrito oficial de las posibles consecuencias penales si no expulsaban a Torra de su escaño.

Cs dio el primer paso hace pocos días, con la presentación de una denuncia por incumplimiento de sentencia contra los integrantes de la Mesa a la Junta Electoral. "Utilizaremos todas las herramientas a nuestro alcance para que Torra deje de aferrarse a un cargo que no le corresponde", ha avisado hoy a Lorena Roldán. En nombre del PP catalán, su secretario general ha explicado que "si por cualquier circunstancia el señor Torra participa en la votación, el señor Torrent y los restantes miembros de la Mesa que así lo avalen estarían incurriendo en varios delitos".

Entre los delitos que los dos partidos de la derecha entienden que pueden atribuirse a los afectados están los de prevaricación y desobediencia en el caso del presidente del Parlament y los miembros de la Mesa y el de usurpación de funciones para Torra.