La Plataforma 6-F de Catalunya se quiere distanciar de la extrema derecha que se está expandiendo en este espacio que ha organizado varias protestas de los agricultores los últimos días. Con el fin de desvincularse "del todo" de los "posibles lazos con partidos fascistas españoles" cambiarán de nombre a Plataforma Pagesa. La decisión se ha tomado consensuadamente entre las diferentes delegaciones que forman parte de la organización, según se ha comunicado posteriormente en un comunicado. Aunque la plataforma desde un inicio se ha autodenominado como "independiente", en los últimos días se ha hecho público que algunos de los nombres que firmaban los manifiestos estatales han sido ligados a Vox.

Vox ha hecho bandera de las reivindicaciones de los agricultores; sin embargo, siempre ha tratado el movimiento como independiente. Sin embargo, la participación de varias personas próximas en el partido de extrema derecha o la asimilación de parte del argumentario han hecho que algunos manifestantes no estén cómodos. Por ejemplo, el abogado Xaime da Pena, quien pagó la lona de Desokupa en Madrid, se encontraba dentro de la plataforma. Los agricultores catalanes se quieren desvincular de todo y organizarán la Plataforma Pagesa a través de un grupo motor y varias agrupaciones territoriales.

¿Quién hay detrás de la Plataforma 6-F en el Estado español?

En el calor de las manifestaciones de los agricultores en Francia y otros países de la Unión Europea (UE), se empezaron a crear grupos de productores en redes sociales instando a hacer lo mismo en España, con la vista puesta el 6 de febrero. Aquel día hubo múltiples tractoradas en que participaron una gran mayoría de agricultores y ganaderos a título individual y al margen de las organizaciones agrarias; algunos de sus promotores crearon la llamada Plataforma 6-F, con portavoces que en el pasado han sido relacionados con Vox y movimientos de ultraderecha.

Chico solo los participantes en las protestas estaban ligados o eran del partido, si no que recogiendo algunos de sus lemas y los exportaban a las reivindicaciones agrícolas. Por ejemplo, la guerra contra la Agenda 2030, el patriotismo alimentario y la potenciación del libre mercado.

Una figura que aglutina en sí misma esta relación entre la Plataforma 6-F y la extrema derecha es la de Lola Gúzman, quien ha ganado popularidad y visibilidad a las protestas, aunque sobre el papel no hay jerarquías. Es exmilitante de Vox, pero ha sido crítica con el partido de Santiago Abascal, al cual ha acusado de querer capitalizar estas protestas, pero no quiere decir que Gúzman se desmarque de los discursos de extrema derecha, ya que repite buena parte de los mantras de Vox. Es extremadamente beligerante, sin ir más lejos, recientemente, se ha dado a conocer que la policía la denunciará por haber gritado en una protesta: Si levantáis la porra contra un español, os las veréis... Os mató en pocos, la ETA, hijos de puta".