El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha dado positivo en covid este jueves por la tarde en el test|tiesto preceptivo para la asistencia a cumbre del G20, y como consecuencia, no podrá viajar a Nueva Delhi, en la India, los próximos días 9 y 10 de septiembre. En su lugar|sitio irá la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, y el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares.

Una cumbre marcada por las tensiones entre Rusia y Occidente

A través de un tuit, Sánchez ha informado de su situación y ha explicado que se encuentra "bien", y desde la Moncloa han añadido que seguirá trabajando desde su residencia. El presidente español, que es un invitado permanente del G20 aunque no sea miembro, no será la única gran ausencia. Por motivos distintos, el presidente ruso, Vladímir Putin, y el presidente chino, Xi Jinping, tampoco asistirán.

Putin, que desde que inició la invasión de Ucrania no asistió a las reuniones con los líderes internacionales, volverá a enviar en su lugar al ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov. Para el líder chino, esta será la primera ausencia en una cumbre del G20, aunque en las citas de 2020 y 2021 no participó presencialmente por las medidas impuestas por la pandemia. China estará representada por el primer ministro, Li Qiang.

Aunque ninguno de los dos se ha referido a la guerra o las tensiones con Occidente como los motivos para no asistir al 18º encuentro de jefes de estado y de gobierno en el foro de cooperación económica internacional, es evidente que estas cuestiones marcarán la cumbre. Precisamente, la Unión Europea, representada por el presidente del Consejo Europeo, Carlos Michel, y la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, intentará conseguir apoyos a favor de Ucrania del resto de estados.

Alcanzar acuerdos sobre el desarrollo y crecimiento sostenibles, la financiación para hacer frente al cambio climático, el comercio y las inversiones, la transición digital y la paz internacional serán otras cuestiones sobre las que los líderes debatirán para intentar llegar a un consenso. Otro tema clave será la reforma del sistema de bancos de desarrollo, y en este sentido, se prevé que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pida una reforma del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional.