Después del agitado congreso fundacional del Partit Demòcrata Català, los dos candidatos que los últimos meses habían aparecido como aspirantes a la dirección del nuevo partido, Jordi Turull y Germà Gordó, han decidido dar un paso al lado al mismo tiempo que se ha articulado una candidatura encabezada por la hasta ahora portavoz de CDC, Marta Pascal (Vic, 1983), y el diputado David Bonvehí (Fonollosa, 1979). Serán ellos dos los que a lo largo de esta semana presentarán las propuestas de su candidatura frente de la segunda lista que opta a la dirección en las primarias del próximo sábado, encabezada por Ignasi Planas.

Nuestra candidatura trae frescor (Bonvehí)

¿Qué quieren hacer con el Partit Demòcrata Català? ¿Qué aportarán ustedes que no pudieran aportar otros candidatos como Jordi Turull o Germà Gordó, o su rival, Ignasi Planas?

David Bonvehí: Lo primero que aportamos son muchas ganas de hacer una cosa muy grande y de mucha gente. Nos parece que nuestra candidatura trae frescor. Eso tiene que permitir en estos primeros tiempos que mucha gente se apunte a este proyecto, y por lo tanto, ante todo queremos ampliar la base de asociados que tenemos, recuperar a los que podamos recuperar de CDC, pero también nos parece una oportunidad el empuje de la candidatura para que otra gente se pueda sumar.

Marta Pascal: Parece que la política y los ciudadanos se han despistado el uno del otro. Nosotros aspiramos a reconducir. Que la gente entienda que eso de la política no es nada marciano sino que les afecta en el día a día y que donde ahora estamos nosotros pueden estar ellos en algún momento.

¿Qué nombre votaron para el nuevo partido en el congreso fundacional?

MP: Yo, Partit Demòcrata Catalá.

DB: Yo, Partit Nacional.

Me reconforta mucho saber que Mas y Munté están ahí (Pascal)

¿En esta ejecutiva del nuevo partido cómo quedan Artur Mas y Neus Munté?

MP: Hay un liderazgo clarísimo por parte del president Mas y Neus Munté. Nosotros quizás tenemos que llevar más el día a día, el engranaje de este nuevo partido, desplegarlo como tal a nivel territorial y buscar este nuevo encaje político. Ellos tienen un papel absolutamente clave, un poco como la guía, el carril del medio que tenemos que coger. A mí me reconforta mucho saber que están, por el perfil que tienen los dos y por lo que han demostrado a lo largo del tiempo. El president Mas clarísimo, por el liderazgo en el proceso, y Neus Munté por esta manera diferente que tiene de hacer política, de aproximarse a la gente. A nosotros nos suma mucho, y a la vez nos puede ayudar mucho.

¿Pero la candidatura que ustedes encabezan con quién se alinea? ¿Es la candidatura de Mas, de Puigdemont, de las bases?

DB: Diría que es la candidatura con un espíritu parecido al último congreso. Por lo tanto, forma parte de un proyecto político, pero tiene claro que las cosas se pueden discutir todas, y que no tenemos límites o llegaremos hasta allí donde queramos. Aspiramos a eso. Tenemos claro que representamos un proyecto político, pero a la vez somos conscientes de que todo se tiene que discutir, que eso tiene que ser de todos, y que tiene que ser un partido donde muchísima gente se sume pero que no sólo se sume, sino que participe, que decida. En ningún caso seremos una gente que dará órdenes directas y un partido totalmente vertical. Tenemos que huir de eso.

MP: No es que nosotros daremos las órdenes, sino que se tiene que instalar una dinámica en que todo el mundo es responsable de todo. Tienes la posibilidad de aportar mucho pero también tienes que saber que eso funciona porque estás. A nivel de método es revolucionario. No es sencillo, todos tendremos que hacer el esfuerzo de salir de nuestra zona de confort, de aquello que siempre lo hemos hecho así. No nos da miedo, seguro que irá bien.

Tenemos que hacer un cambio de mentalidad en el partido para no sólo mirar de cara adentro sino mirar de cara afuera (Bonvehí)

¿Qué es lo que tienen que cambiar de lo que se había hecho hasta ahora, lo que no pueden hacer de lo que se hacía?

DB: Mirar de cara adentro sólo. No podemos mirar sólo de cara adentro, tenemos que mirar de cara afuera. El asociado es importante, porque es el núcleo duro del partido, pero las ideas, los actos, la acción política no sólo tiene que estar encaminada a los militantes, tiene que traspasar, tiene que tener mentalidad abierta de cara a la sociedad. Tenemos que hacer este cambio de mentalidad para no sólo mirar de cara adentro sino mirar de cara afuera.

De momento, las bases les han dado algunas líneas de actuación en el congreso. Por ejemplo, no descartan la vía unilateral...

MP: Agotadas todas las vías y hecho todo lo que se tiene que hacer, si el Estado español sigue cerrando las puertas a que pueda haber una negociación, un proceso eminentemente político, nosotros no descartamos hacer un acto de obediencia con respecto al pueblo de Catalunya. Es bueno y saludable que esté contemplado en nuestro texto fundacional.

DB: Muchos actos del procés han sido así. Tampoco tendría que extrañar tanto que seguramente el acto final sea un acto propiamente de aquí.

El RUI no es descartable, pero tenemos que seguir haciendo lo que hemos hecho hasta ahora, que es una cosa ordenada, arreglada y pacífica (Pascal)

¿También contempla el referéndum unilateral (RUI) este enfoque?

MP: El RUI no es descartable. Al final es un modelo más. Tienes la vía escocesa, tienes el referéndum constituyente que marca nuestra hoja de ruta... Y también tienes esta otra vía que no tenemos que descartar. Veremos cómo va la consulta de la ANC. En este proceso saldremos adelante si somos nosotros mismos, como país. Es decir, las condiciones que tenemos son las que tenemos, es evidente que no tiene nada que ver un español con un británico, en términos de cómo se entiende la democracia. Sabemos que tenemos la fuerza de la gente, un mandato, un Parlament y un Govern que transitan en esta dirección. Sabemos que no tenemos la mayoría social en términos de más del 50%, y eso nos obliga. Tenemos que seguir haciendo lo que hemos hecho hasta ahora, que es una cosa ordenada, arreglada y pacífica y que obedezca a lo que nos dijo la gente el 27-S. Eso es meridianamente claro.

¿Qué prevén que pasará con la cuestión de confianza?

MP: No me atrevo a hablar por la CUP. Pero no me imagino otra cosa que seguir tejiendo e impulsando este procés con toda esta gente que el día 27 decidió que en este país se tenía que hacer este encargo de construir un nuevo Estado. La pregunta le corresponde reponderla a la CUP. Nosotros hemos sido muy claros y muy contundentes.

La CUP tiene que explicar que está en la construcción y el compromiso y no en el bloqueo y el despistarnos (Pascal)

¿Se tiene que fiar JxSí de la CUP?

MP: No es un tema de si nos tenemos que fiar de la CUP. Sino que la CUP tiene que responder a una pregunta muy clara. La pelota está en su tejado. Nosotros estamos exactamente donde queríamos estar en términos de procés, pero tienen que ser ellos los que tienen que explicar que están en la construcción y el compromiso y no en el bloqueo y en el despistarnos de lo que pidió a la gente el 27-S. Es evidente que el Partit Demòcrata se imagina a un modelo de país diferente del de la CUP, pero si los dos nos lo imaginamos libre y ahora tenemos la oportunidad de hacerlo, hagámoslo.

¿Y las relaciones con ERC cómo las ven?

MP: Trabajamos bien en el Govern, en el grupo parlamentario. Es verdad que se han producido votaciones diferenciadas en el prisma ideológico, y en algunos aspectos más de modelo, pero en todo aquello que es la hoja de ruta este grupo es absolutamente granítico, trabajamos conjuntamente con una dinámica muy positiva. En términos de experiencia política estar adscrito en un grupo parlamentario donde hay partidos políticos diferentes y gente que viene del mundo externo a la política también ha sido un reto. Yo de eso hago una valoración positiva, y desde la perspectiva del Govern está demostrado que es sólido, que es único y solidario y trabaja en la línea que tiene que trabajar, que es la que nos pidió la gente el 27-S.

Tendremos el Partit Demòcrata en las próximas elecciones al Parlament (Pascal)

¿A las elecciones catalanas se tiene que presentar el PDC o una reedición de JxSí?

MP: Las próximas elecciones catalanas tienen que ser elecciones constituyentes y, por lo tanto, significa que habremos llegado donde queríamos llegar, que es tenerlo todo preparado para tener un país normal. Y como tendremos un país normal se presentarán formaciones políticas con prisma ideológico. JxSí es una herramienta al servicio de hacer el nuevo Estado. Una vez lo tengamos, queremos volver a estar citados a las urnas para esta futura Constitución y para hacer el arranque definitivo del nuevo Estado. Se presentarán los partidos normales y el PDC lo tendremos aquí trabajando.

No me imagino otra cosa que una candidatura encabezada por Puigdemont en el Parlament (Pascal)

¿Y el candidato será Carles Puigdemont?

MP: Yo espero que sí. Vaya, es que no me imagino otra cosa.

DB: Además, nos gusta mucho el estilo Puigdemont. Creemos en él y pensamos que está siendo un gran president, como lo fue el president Mas.

¿Y si Puigdemont no quisiera? ¿Mas?

MP: El president Mas ya ha dicho que él está incardinado a acabar de dar la salida a nuestro proyecto político y que la vida institucional ya la ha hecho. Yo no veo este escenario. Veo un escenario en que el president Puigdemont sigue dando pasos firmes.

¿Les ha sorprendido cómo ha ido el congreso fundacional?

MP: Ya en el Torn Obert se notaba que la gente quería opinar. En las primarias y el supersábado votaron 14.000 personas. Se iba palpando que la gente tenía ganas de ser preguntada y de tomar decisiones. El congreso va con el tono y la inercia que eso había tenido hasta ahora. Es revolucionario desde la perspectiva de entender que, por fin, muchos decidimos por muchos, y antes nuestro modelo era que pocos decidían por muchos. Era el modelo que teníamos en base a la cultura política de la Catalunya autónoma y de un sistema de partidos más tradicional. En el momento que las costuras de los partidos políticos cambian y el sistema político cambia, como también está pasando en el Estado español, la gente pide que la política y la gente se vuelvan a encontrar.

Tenemos que recuperar el espíritu de movimiento que tenía CDC (Bonvehí)

¿Serán también capaces de sacarse la etiqueta CDC, aquello que les ha aportado de negativo?

DB: A mí me explican, porque yo no había nacido, que cuando se fundó CDC era un poco eso. No se fundó a través de ideas cerradas, ni despachos muy pensados, sino más como un movimiento de gente, que agrupaba a gente de varios sectores, que pensaban de una manera u otra, gente con interés por servir a su pueblo o a su país, con sensibilidad por la lengua catalana... Ahora eso lo tenemos que recuperar. Y tenemos que salir adelante.

¿Este proceso ha servido para expulsar el espíritu de Pujol?

MP: La potencia de esto es tan grande, que todo el mundo se siente protagonista. Allí en el congreso nos encontramos gente de realidades muy diversas. Algunos con una relación muy estrecha con el president Pujol, otros con no tanta relación, algunos que lo han votado, otros que no lo hemos podido votar. No tengo la sensación de que este sentido estuviera en el congreso. Teníamos la sensación de que lo que hacíamos era muy fundacional, que nos poníamos a trabajar en un momento incierto pero con muchas sensibilidades.

DB: A nivel comarcal, estamos haciendo el trabajo de llamar a militante por militante de CDC, porque hay mucha gente que no es consciente de lo que significa este proceso, y la mayoría de gente quiere seguir. Incluso la gente más mayor, que nos daba más miedo. Yo creo que seguirán. Se enlaza muy bien la historia de un éxito con otro.

MP: No lo vivimos como una ruptura sino como un darse la mano. Es también una sucesión de cosas.

DB: Necesitaremos un acompañamiento, pero creo que una vez explicado, la mayoría de gente seguirá.

Su candidatura no es 50% hombre-mujer...

MP: Tenemos cinco mujeres y siete hombres, que es lo que permiten los estatutos.

DB: Por lo tanto, paridad sí que hay, es decir, 60/40.

MP: A nivel de liderazgo somos un hombre y una mujer. El drama es cuando en las estructuras sólo hay hombres, o sólo hay mujeres porque son una cuota. En el momento en que hay hombres y mujeres con responsabilidades compartidas en función también de los méritos de cada uno, eso refleja la calle, la realidad.

A CDC le ha costado...

MP: Sí, a CDC le ha costado. Hemos ido haciendo el tránsito. Recuerdo que cuando me hicieron presidente de la JNC muchas mujeres convergentes históricas me decían que eso era revolucionario. Ahora de una vez por todas nuestro partido ha sabido ver que eso forma parte de la normalidad de la calle, que haya hombres y mujeres.

Como lo harán para evitar caer en los errores CDC.

DB: La base al final es la motivación de la gente. Es muy importante no caer en la comodidad. Hace falta renovación permanente. Cambios continuos porque la sociedad cambia y la gente cambia. La dirección ejecutiva se tiene que asegurar de que ningún ámbito del partido quede cerrada ni sea un espacio para un grupo reducido de personas. Y a nivel territorial, también. Las cosas, sin embargo, las tenemos que hacer gradualmente. No se nos pueden pedir resultados en medio año.