El PP, siguiendo los pasos de Ciudadanos, ha presentado esta mañana una denuncia ante de la fiscalía contra el president de la Generalitat, Quim Torra, y funcionarios autonómicos y municipales por no atender la instrucción de la Junta Electoral Central (JEC) para retirar los lazos amarillos de los edificios públicos. Mientras que la presidenta de Ciudadanos en Catalunya, Inés Arrimadas, lo ha hecho en Barcelona, el PP lo ha hecho en Madrid.

La denuncia del PP ha sido presentada esta mañana por el secretario general del partido, Teodoro García Egea, por supuesto "delito de denegación de auxilio a requerimiento de la autoridad competente" y de "desobediencia" a sendos artículos del Código Penal, por lo cual en el escrito se reclaman las "acciones penales oportunas".
 

El presidente del PP, Pablo Casado, ya había anunciado horas antes, en una intervención en Sevilla, que la denuncia estaba preparada.

Los populares consideran "irrelevante" que, tal y como argumenta Torra en su alegación a la Junta Electoral Central, pueda existir o no dificultad para la retirada de los símbolos porque el requerimiento es sencillo y se limita a exigir que "ordene" dicha retirada, un mandato "claro, directo y sencillo que no ha sido acatado".

Aparte de denunciar a Torra, el PP también se dirige contra los funcionarios o autoridades autonómicas y locales que "produzcan, permitan o amparen, con su acción u omisión, la exhibición de símbolos ideológicos o partidistas en edificios y espacios públicos".

Reclama el PP que se les requiera la retirada de la "simbología partidista de los edificios públicos" con la finalidad de "restaurar la legalidad", la autoridad de la Junta Electoral, y "el principio de neutralidad y demás principios que rigen un proceso electoral libre".