Dos meses después de destaparse el escándalo del CatalanGate, las respuestas siguen sin llegar y las responsabilidades no han sido asumidas. Con la intención de no normalizar el hecho de que este escándalo se haya ido enfriando, Òmnium Cultural sigue denunciando el espionaje, especialmente a nivel internacional. La próxima acción que organizará la entidad, en colaboración con el Instituto de Derechos Humanos de Catalunya, será organizar un Side Event en Ginebra, el próximo 30 de junio, en el marco de la 50.ª sesión del Consejo de los Derechos Humanos, con la intención de denunciar el CatalanGate.

Durante la conferencia, que contará con la participación del expresidente de Òmnium Jordi Cuixart, seis personalidades expertas y activistas del ámbito internacional hablarán de las diferentes implicaciones que tiene la vigilancia ilegal sobre la vulneración de derechos humanos. Entre los ponentes, representantes del Instituto de Derechos Humanos de Catalunya, Citizen Lab, Front Line Defenders, Organización Mundial Contra la Tortura y Democratic Society. Esta es una acción más de la entidad para seguir explicando el escándalo por todas partes. Justamente esta semana empezaba con la irrupción del presidente de Òmnium, Xavier Antich, ante el Human Rights Council de las Naciones Unidas, donde compareció a través de un vídeo y pidió responsabilidades al Gobierno por el espionaje a independentistas.

"Citizen Lab ha certificado que 65 personas han sido espiadas a Catalunya de manera ilegal. El CatalanGate es el mayor caso de espionaje en el mundo utilizando Pegasus y hay pruebas convincentes que señalan el estado español", empezó relatando Antich, que recordó que las víctimas son políticos, activistas, periodistas y abogados, entre otros, relacionados con el movimiento en favor de la autodeterminación de Catalunya. En la misma línea, el presidente de la entidad independentista recordó que Òmnium, que es miembro de la European Language Equality Network, ha tenido víctimas de este espionaje como es el entorno del expresidente Jordi Cuixart. Antich aprovechó para apuntar que Cuixart estuvo encarcelado y que las Naciones Unidas ya lo denunciaron a través del Grupo de Detenciones Arbitrarias de la ONU.

Después de su intervención, el relator especial sobre los derechos a la libertad de reunión pacífica y asociación, Clément Voule, contestó a Òmnium Cultural, hecho poco habitual, haciendo un llamamiento al Consejo de derechos humanos a tomar una "acción contundente" para que los estados prohíban el uso de Pegasus, ya que es una herramienta que "vulnera la privacidad y pone en peligro a la ciudadanía".