Hoy ha tomado posesión de su cargo el número 2 de la fiscalía catalana, la mano derecha de Francisco Bañeres. Pedro Ariche ha sido nombrado teniente fiscal de la Fiscalía Superior de Catalunya y en su primer discurso ya ha alertado tanto al president de la Generalitat, Quim Torra, como a los Mossos d'Esquadra.

Ariche ha comparado la situación en Catalunya y la desobediencia con el golpe de estado del 23-F, ha avisado a los Mossos de que ciertas manifestaciones en la calle no son libertad de expresión y, por lo tanto, hay que acabar con ellas y ha citado, haciéndoselo suyo, el discurso de Felipe VI del 3 de octubre.

En su discurso de toma de posesión en la sede de la Fiscalía Superior, Ariche ha cargado con fuerza contra la ruptura de la legalidad por parte de cargos públicos comparando el proceso independentista y la desobediencia con el golpe de estado del 23-F de 1981. Ha recordado a un profesor de Derecho suyo que dejó de dar clase por el golpe de estado, recordando que el Código Penal sanciona a los funcionarios que sigan en el cargo bajo las órdenes de los alzados. Eso le ha servido para asegurar que los funcionarios tienen que ser los primeros al cumplir la ley, pero también al defenderla y "reponer su vigencia cuando se rompa, siendo legítima la desobediencia a los que precisamente para romperla y sustituirla por su particular arbitrariedad pierden cualquier indicio de legitimidad en el ejercicio de su función pública".

A la policía le ha dejado claro que tiene que evitar "la ocupación irregular" del espacio público por motivos políticos, ya que "no tiene nada que ver con el legítimo ejercicio de la libertad de expresión". Además, quiere que los Mossos d'Esquadra eviten enfrentamientos entre colectivos opuestos. De hecho, ha pedido a las instituciones catalanas que gobiernen pensando en todos los catalanes y al president de la Generalitat, Quim Torra, le ha dicho que "quien pide diálogo también tiene que saber coser".

Después de agradecer el papel de la Guardia Urbana de Barcelona y las diversas policías locales en los pequeños delitos diarios, ha dicho que a los Mossos d'Esquadra, como policía integral de Catalunya y el cuerpo policial más próximo, les corresponde "velar por la correcta convivencia de todo el mundo en los espacios públicos, especialmente los destinados al ocio y disfrute de todos, evitando que se produzcan situaciones de confrontación cuando se ocupan de manera irregular a través de formas que no tienen nada que ver con la libertad de expresión". También les ha exigido que "adopten de oficio las medidas necesarias para evitar que estas situaciones indeseables se produzcan, y que si se producen impidan el enfrentamiento entre particulares como los que desgraciadamente se han visto últimamente".

Con el Rey

De hecho, se ha querido dirigir también a los ciudadanos de Catalunya que se han visto directamente o indirectamente afectados por "actos de coacción, amenaza, discriminación o de rechazo público en razón de sus ideas, pensamiento, origen o por su voluntad firme de respetar la legalidad, o que han sido señalados públicamente por cualquiera de estas circunstancias". A todos ellos, y citando el discurso del rey Felipe VI el 3 de octubre, les ha dicho que "no están solos y nunca lo estarán", ya que la fiscalía está "pendiente de estos actos chapuceros, absolutamente incompatibles con la pacífica convivencia que pide a una sociedad democrática". Así, el ministerio público, ha dicho, dará a las fuerzas policiales las órdenes oportunas para que cesen estas "conductas reprobables" o poner a disposición judicial a los autores.

A los cuerpos policiales también les ha dicho que como policía judicial sólo trabajarán bajo las órdenes de los fiscales aquellos cuerpos y agentes los que sobresalgan y tengan un "firme compromiso de respeto a la legalidad".

Avisando a Torra

En este sentido, ha pedido que se constituya oficialmente Govern pronto, para mantener buenas relaciones siempre dentro del respeto institucional y la legalidad constitucionales y estatutarias. Por eso, ha recordado que "las instituciones públicas tienen que ser representativas de todos los ciudadanos y tienen que servir a sus fines comunes, no pueden estar permanentemente secuestradas por la ideología, más propia de la actuación de los partidos políticos, y quien pide diálogo también tiene que saber coser y representar a todos los ciudadanos de Catalunya". También ha deseado que haya estabilidad en el gobierno español.

Justamente, se ha mostrado esperanzado por el hecho de que pronto se den "las debidas condiciones" que permitan a los fiscales volver a participar en el Centro de Estudios Jurídicos y Formación Especializada".

En el acto ha acudido la cúpula fiscal de Catalunya, así como de los cuerpos policiales y la abogacía. Ariche también se ha acordado del anterior fiscal superior, José María Romero de Tejada, muerto en otoño, y ha defendido el papel del fiscal como protagonista de la instrucción penal. Al futuro Govern de la Generalitat le ha recordado algunas inversiones pendientes en edificios apropiados por la fiscalía en Mollet del Vallès, Vic, Sant Boi, Sant Feliu y Cornellà de Llobregat y Badalona.