La consellera de la Presidencia y portavoz del Govern, Neus Munté, no quiere hablar ahora sobre un adelanto de la fecha del referéndum en caso de que se inhabilite un cargo electo o institucional como la presidenta del Parlamento, Carme Forcadell, según ha dicho en una entrevista en ACN.

"No quiero adelantar escenarios que todavía no se han producido, nos tenemos que centrar en lo que tenemos delante manera inmediata, trabajar para que se pueda hacer el referéndum y se puedan aprobar unos presupuestos muy necesarios", ha asegurado, y ha añadido que "en ningún caso hay la certeza" que se puedan producir inhabilitaciones en los próximos meses. Aun así, la consellera ha admitido que si se producen nuevos acontecimientos, como podrían ser inhabilitaciones, los partidos favorables al proceso tendrían que "consensuar" la nueva situación.

Después de que el portavoz del secretariado nacional de la CUP, Quim Arrufat, haya apostado por avanzar el referéndum si se inhabilita Forcadell, la consellera de la Presidencia ha considerado que no es momento de adelantar escenarios. Munté ha asegurado que el Govern trabaja con el calendario de celebrar el referéndum en otoño del 2017 y ha afirmado que esta hoja de ruta no ha cambiado. "Este es el escenario con el que trabajamos y con el que seguiremos trabajando", ha añadido.

Agresión democrática

Según Munté, una inhabilitación de un cargo electo o institucional sería una "agresión a la democracia con mayúsculas" y este hecho obligaría a los partidos soberanistas y sociedad civil a sentarse y plantear "una respuesta de país y una respuesta a la altura de un hecho tan grave". La consellera se refiere a la inhabilitación de Forcadell pero también a una inhabilitación que afectara al expresident de la Generalitat Artur Mas, las exconselleres Joana Ortega y Irene Rigau o cualquier cargo electo.

El calendario hacia el referéndum es, como ha insistido Munté, el que se marcó en el debate de política general de octubre, aunque ha admitido que si se producen nuevos acontecimientos los partidos que dan apoyo al proceso tendrán que "consensuar" la nueva situación. "Es evidente que cada nuevo hecho que suceda, y una inhabilitación sería un hecho muy grave, nos haría sentarnos y analizar la situación", ha añadido Munté para después apuntar que "en ningún caso hay la certeza" de que se puedan producir inhabilitaciones en los próximos meses.

Salida a los obstáculos

En este sentido, Munté ha recordado que en varias ocasiones los partidos se han sentado para encontrar "salidas en positivo" a los diferentes "obstáculos" y ha citado el momento en el que se planteó la cuestión de confianza para superar el rechazo de la CUP a los presupuestos del 2016. Aun así, la consellera de la Presidencia ha afirmado que hay "mucho trabajo por hacer" y que el Govern se tiene que centrar en las cuestiones más inmediatas, eso es, a aprobar los presupuestos y trabajar para que se pueda celebrar el referéndum.

Antes de acabar el año se celebrará la cumbre del referéndum que JxSí y la CUP aprobaron en el marco del debate de política general. Según Munté, el objetivo del encuentro tiene que ser poner en común los trabajos preparatorios, el estado de la situación, el calendario y todos las acontecimientos que se puedan haber producido desde octubre, cuando se celebró el debate de política general. "Poner en común todo lo que ha ocurrido y plantear el inicio del año que viene con, si hace falta, ideas renovadas y compromisos todavía más cerrados", ha concluido.