La militancia de Junts ha avalado finalmente a David Torrents como secretario de organización del partido, arreglando de esta manera los votos de castigo que un sector hizo en el reciente congreso de Argelers, en que el cargo quedó vacante porque no superó el umbral. Junto con Torrents se ha votado en bloque la otra miembro de la executiva que no había superado el mínimo de votos, Ester Vallès, y también Lluís Guinó, que en este caso releva al exconseller Miquel Sàmper, porque tenía incompatibilidad con su actual trabajo. La propuesta de Turull como secretario general, recuperando los dos cargos considerados próximos a la presidenta del partido, Laura Borràs, ha sido aprobada con 1.162 votos favorables (62,41%), y 700 votos en contra (37,59%). A la votación han participado 1.862 afiliados, que representan el 30,98%. La cifra de participación es similar a la del congreso de Argelers.

Torrents ha agradecido a los militantes su apoyo:

La cúpula de Junts se movilizó ayer no solo para garantizar la ratificación de los nombres propuestos, sinó también la participación de la militancia. Después de conocer el resultado, Turull ha expresado su satisfacción por el resultado de la votación porque "demuestra el espíritu unitario de los afiliados y afiliadas de Junts con su voto". La propuesta obedecía "al equilibrio del acuerdo de la candidatura unitaria" y permite seguir trabajando "para ser útil con un mensaje de mentalidad de equipo". En el congreso de Argelers, donde se combinó una participación moderada de la militancia con pequeños movimientos de castigo a los candidatos próximos a Borràs, Turull y la vicepresidenta del partido Anna Erra, alcaldesa de Vic, consiguieron más votos que Laura Borràs, en la ratificación de la nueva ejecutiva. Borràs obtuvo 1.776 votos y Turull 1854, mientras Erra recogió 1.791. Además, entre los menos votados a la nueva dirección figuraban dos de las apuestas directas de Borràs, la nueva vicepresidenta Aurora Madaula y David Torrents, que obtuvieron 919 y 918 votos, respectivamente. Madaula accedió a la ejecutiva, pero Torrents no consiguió superar el umbral.

Esta situación provocó momentos de tensión porque el cargo de secretario de organización quedó vacante, y podía resquebrajar la apuesta unitaria que habían pactado Borràs y Turull con contactos con el partido en el territorio. La decisión para resolverlo correspondía a Turull como secretario de organización, según los estatutos, y este decidió reforzar sin ambages la apuesta unitaria volviendo a presentar a Torrents y Vallès. Con la aprobación de su iniciativa queda refrendada su opción, aunque se han registrado los 700 votos en contra. El caso es que en la próxima executiva del lunes el nuevo organigrama de Junts podrá trabajar al completo. Además de la preparación de la campaña electoral, y la urgencia de designar un candidato o candidata para Barcelona, Junts está elaborando una auditoría del funcionamiento del Govern y del pacto con ERC.