Pedro Sánchez tiene un plan para seguir marcando agenda política y social a pesar de tener una mayoría parlamentaria muy frágil, explotando al máximo sus competencias ejecutivas y reglamentarias. El presidente español ha pedido a sus ministros que planteen medidas "disruptivas" e identificables con su ejecutivo que no necesiten ser aprobadas por el Congreso de los Diputados, según ha publicado *El País* y ha confirmado la portavoz del ejecutivo y ministra de Inclusión Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, en una entrevista en la Cadena Ser. Según el rotativo, Sánchez quiere transmitir un mensaje político, interno y externo: “Continuaremos gobernando hasta 2027, aunque el Congreso sea ingobernable". Por ello, el presidente español ha pedido a cada ministerio 3 o 4 medidas sociales “ambiciosas” y “disruptivas” para 2026 que se puedan aprobar sin pasar por el Congreso, buscando que sean fáciles de aplicar, con impacto y muy “vendibles” ante la opinión pública. Lo hace después de un final de año marcado por escándalos y malos resultados electorales, y con la coalición de investidura muy resquebrajada, con Junts dando el pacto por roto y Podemos a la contra, y a las puertas del ciclo electoral que abrieron las elecciones del 21 de diciembre en Extremadura.
Recuperar la iniciativa en el nuevo ciclo 2026
Según El País, Sánchez hizo el encargo a sus ministros en noviembre y durante las semanas posteriores insistió en pedir estas propuestas que “conecten con la gente” pero que no dependan de sus aprobaciones en el Congreso para recobrar la iniciativa en el nuevo ciclo electoral de 2026. Elma Saiz ha avalado el encargo del presidente. “Lo que sería extraño es que un Gobierno no estuviera pensando constantemente en medidas que mejoren la vida de la gente", ha justificado. “Es importante que sepamos cuál es nuestra situación. Hay medidas que no deben ser convalidadas por el Congreso. Hay muchas cosas que se pueden hacer que no deben tener este rango legal”.
Elma Saiz también ha opinado sobre el batacazo electoral del PSOE de Extremadura. “No han sido los resultados que esperábamos”, ha reconocido la nueva portavoz, quien ha añadido que “está en nuestras manos mejorar estos resultados”. Aun así, se ha mostrado “muy consciente” de que “la corrupción produce desafección”, pero ha responsabilizado a María Guardiola del adelanto de unas elecciones que han propiciado “la participación más baja de la historia y que se haya duplicado la representación de la extrema derecha en el Parlamento extremeño”.
La legislatura es viable, incluso sin presupuestos
Paralelamente, Elma Saiz ha insistido en que su ejecutivo presentará los presupuestos generales del Estado (PGE) “a lo largo del primer trimestre de 2026”, y trabaja ahora “con discreción” para conseguir los apoyos necesarios para aprobarlos en el Congreso. Según Saiz, el ejecutivo se centra también en cumplir los acuerdos alcanzados con formaciones como Junts para “recobrar” su confianza. Con todo, ha apuntado que si los apoyos no llegan y las cuentas no prosperan en el Congreso, la legislatura no cae “de ninguna manera”. “Tenemos mucho por delante”, ha insistido, porque “hay que continuar desplegando el escudo social, presentar medidas en vivienda, y la legislatura debe seguir”. En este sentido, ha recordado que las legislaturas “son de cuatro años” y el ejecutivo español está “demostrando” que vale la pena agotar el mandato. Saiz también ha insistido en que su gobierno está actuando “con total contundencia” respecto a casos como el del exministro Ábalos y ha puesto sobre la mesa un “plan de Estado contra la corrupción”.
Críticas a Albiol por actuar con "inhumanidad, racismo y xenofobia"
En la misma entrevista, la nueva portavoz del gobierno español ha acusado al alcalde de Badalona, Xavier García Albiol, de haber actuado con “inhumanidad, racismo y xenofobia” respecto de los ocupantes del edificio B9, desalojado el 17 de diciembre, y de dejar “durmiendo en la calle a familias y niños” solo “por su origen”. Saiz ha lamentado que todo ello haya tenido lugar con el “silencio ensordecedor” del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que ha sido “incapaz de decir nada” a un alcalde que “no es la primera vez que tiene actitudes de este tipo”. La ministra ha recordado que la resolución del caso es “competencia municipal”, pero ha destacado que la Generalitat ya ha planteado una propuesta para buscar soluciones.
