El juez Pablo Llarena acudirá ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) de Luxemburgo en el momento en el cual Alemania acepte entregar al president Carles Puigdemont por cualquier delito que no sea el de rebelión, una iniciativa que paralizaría provisionalmente la causa contra él.
El juez del caso del procés en el Tribunal Supremo, Pablo Llarena, empezó el pasado 6 de abril, cuando un tribunal alemán adelantó que no entregará Puigdemont en España por el delito de rebelión, estudió la posibilidad de presentar una cuestión prejudicial ante el TJUE de Luxemburgo.
Pieza separada
Al presentar la cuestión ante Luxemburgo, el procedimiento relativo al president quedará paralizado en una pieza separada desde el mismo instante en que sea admitida a trámite, mientras que el resto del proceso seguirá su curso.
Eso permitiría evitar juzgar a todos los inculpados que no se han escapado de la Justicia por delitos más graves que aquellos por los cuales se entregara Puigdemont.
La fiscalía está de acuerdo con esta iniciativa. No obstante, la duda es cuándo podría plantear la cuestión Llarena. Y este momento llegará cuando Alemania pretenda entregar a Puigdemont por otros delitos que no sea rebelión.
Para que sea admitida a trámite una cuestión prejudicial el juez que la presente se tiene que ver en la situación de adoptar una resolución sobre la cual tenga dudas sobre cómo aplicar el derecho de la UE. Es decir, no es posible cuestionar la acción de otro tribunal, sino tener que adoptar una resolución. Es decir, Llarena no puede cuestionar directamente el tribunal alemán, sino dudar cuándo él tenga que decidir.
Pero fuentes del Tribunal Supremo han informado que sí que podrá acudir ante Luxemburgo cuando tenga que decidir si acepta la entrega de Carles Puigdemont por delitos como malversación o desobediencia y no por el más grave, el de rebelión.
Esta hipótesis todavía no es aceptada como inevitable por el Tribunal Supremo. De hecho, la reunión que hoy están desarrollando fiscales españoles y alemanes en la Haia está concebida para aportar argumentos a la acusación pública germánica.
Estos argumentos tendrían que permitir a los fiscales alemanes para convencer la Audiencia territorial de Schleswig-Holstein, el estado federado por donde entró Puigdemont en Alemania el pasado 25 de marzo y donde quedó inmediatamente detenido, para que acepte entregar al president por todos los delitos por los cuales ha sido procesado y no, como inicialmente ha anunciado, rechazar su entrega por rebelión.
Reunión de fiscales
La reunión entre fiscales alemanes y españoles, en la cual se debate la euroorden dictada contra el president catalán Carles Puigdemont, ha empezado hoy en las 09.00 hora local en la sede de Eurojust, la agencia europea para la cooperación judicial en la Haia.
Según ha confirmado una fuente de Eurojust, el encuentro está teniendo lugar a "puerta cerrada" y se desconoce la duración ya que es —ha insistido— "totalmente confidencial", de manera que no se espera que trascienda información sobre la reunión desde esta institución.
