Miquel Valls, presidente de la Cambra de Comerç de Barcelona, ha reclamado hoy que el Estado pague a Catalunya los 4.000 millones de euros pendientes dentro de la cláusula adicional tercera del Estatut. Este dinero, que tiene que ser destinado a infraestructuras, es ya una deuda histórica que Valls ha pedido que se salde "igual que en su momento se pagó" a Andalucía.

Estos 4.000 millones deberían destinarse a cuatro proyectos estratégicos para Catalunya que siguen aplazados o a medias desde hace años:

1. Corredor mediterráneo

Hace falta que los carriles ferroviarios catalanes puedan adaptarse al ancho internacional a través de un tercer carril entre Castellbisbal, Martorell y Tarragona. También se necesita la inversión para hacer los cambios necesarios para que puedan circular trenes de hasta 750 metros. Esta es la única manera de mejorar la competitividad del transporte de mercancías a gran escala hacia el resto de Europa.

2. Accesos ferroviarios al Puerto

Fomento prometió en 2013 que a final del 2015 tendría listo un acceso de vía única con triple ancho al Puerto de Barcelona. El plazo ya ha pasado y, hoy por hoy, sigue funcionando con unos accesos provisionales. La Cambra de Comerç lamenta que las administraciones públicas competentes no hayan sabido gestionar esta actuación. Los accesos por carretera, en cambio, se pusieron en marcha a principios de este año sin problemas.

3. Cuarto cinturón

Esta autovía, actualmente a medias, tiene como objetivo enlazar el territorio desde Granollers y Mataró hasta Sant Sadurní d'Anoia con la autopista AP7. Se plantea como parte de un eje europeo que evitará pasar por Barcelona. La Cambra pide que se finalicen las obras del tramo comprendido entre Olesa de Montserrat y Viladecavalls, cosa que tiene que permitir poner en valor los tramos que ya están en servicio.

4. Rodalies de Barcelona

La red de Rodalies es la infraestructura que necesita mayor inversión. Valls ha apuntado que ahora "es el momento" de actuar en este servicio, a pesar de las incidencias que las obras puedan generar. Rodalies tiene que ser "la principal solución para combatir la creciente amenaza de congestión a los accesos urbanos de Barcelona" ha señalado.