El Tribunal Supremo ha establecido que se no pueden utilizar banderas no oficiales en el exterior de los edificios públicos en una sentencia en la cual anula un acuerdo del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife de exhibir en su sede como "bandera nacional de Canarias la de las siete estrellas verdes". Eso crea judisprudència, y por lo tanto, la sentencia podría ser el modelo de otros jueces a la hora de decidir hacer retirar símbolos no oficiales de las fachadas de edificios públicos.

Ante el anuncio de la sentencia que se ha hecho pública hoy, el presidente Quim Torra ha recordado su caso en Twitter. Torra está pendiente de que el Tribunal Supremo haga firme la sentencia por la que lo han condenado por no retirar la pancarta que reclamaba la libertad de los presos políticos del Palau de la Generalitat y que supone su inhabilitación como cargo público y presidente de Catalunya.

 

Torra ha tenido que renunciar a su escaño de diputado en el Parlament de Catalunya. Aunque la sentencia no es firme, así lo decidió la mesa presidida por Roger Torrent.

El alto tribunal argumenta que "no resulta compatible con el marco constitucional y legal vigente" ni con el deber de objetividad y neutralidad de las administraciones públicas. No se acepta simbología alternativa a la oficial aunque lo haga al lado de "la bandera de España y las otras legal o estatutariamente instituidas". Aunque se refiere a un caso de las Canarias, eso también afecta de rebote a las esteladas en edificios públicos catalanes o a las banderas LGBTI. Todas las "no oficiales", remarcan fuentes judiciales.

La sentencia del Tribunal Supremo es la respuesta a un acuerdo del pleno del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, de septiembre del 2016, que ha quedado anulado.