La presidencia española de la UE, durante el segundo semestre del 2023, será la ocasión que quiere aprovechar Junts "a fondo" para denunciar la situación a Catalunya, según ha explicado el eurodiputado Toni Comín, después de participar en la reunión que hoy han celebrado en Bruselas los grupos parlamentarios de Junts en el Parlament, el Congreso, el Senado y en la Eurocámara.

Comín ha explicado que los parlamentarios de Junts se coordinarán en las diferentes cámaras para denunciar "vulneración del estado de derecho" en España en el marco del pulso independentista, para señalar cuestiones concretas relativas al reparto de fondos europeos o a la imposición judicial de un 25% de castellano en las aulas, pero también para reprochar un "doble estándar" que a veces aplican las instituciones europeas, como demuestra el hecho de que no se haya enviado a España una misión para investigar el caso Pegasus. "Tenemos que denunciar que es un caso de falta de imparcialidad que el Parlamento no se puede permitir", ha denunciado.

Gol a Aragonès

Por lo que respecta al catalán, Comín se ha referido a la visita que el president de la Generalitat, Pere Aragonès, hizo en Bruselas para reunirse con el comisario de Justicia, Didier Reynders y la advertencia que este le hizo sobre la obligación de cumplir los fallos judiciales. "Es muy inquietante que el presidente de la Generalitat se reuniera con Reynders y que el titular fuera que Reynders le exigía el cumplimiento del 25% de castellano en la escuela", ha reprochado el eurodiputado, que ha comparecido acompañado de los representantes del partido en el Parlament, Congreso y Senado, Albert Batet, Míriam Nogueras y Josep Lluís Cleries.

Según Comín, "no se puede dejar la portería vacía de esta manera, ir a Bruselas y que al final sirva para que el comisario marque un gol de esta magnitud y que los que pase sea un toque de atención del ejecutivo europeo al ejecutivo catalán para que aplique una sentencia que no se tiene que aplicar".

Junta Electoral

Por lo que respecta el informe que la semana pasada hizo llegar la Junta Electoral Central (JEC) al Parlamento Europeo denegando las credenciales como diputados a Carles Puigdemont, Clara Ponsatí, Jordi Solé y al mismo Comín, el eurodiputado ha advertido que demuestra que la JEC se ha situado en rebeldía ante la justicia europea, que avaló los escaños. "Se ha puesto de manifiesto más que nunca la incompatibilidad entre reglamento del Parlamento Europeo y algunas disposiciones de la Ley Electoral española", ha sentenciado.

Según el eurodiputado, cuando el reglamento del Parlamento Europeo habla del trámite de acreditación de credenciales de los diputados, lo que está pidiendo a los Estados es que certifiquen que el diputado no incurre en incompatibilidad con otros cargos, dado que es cada país quien establece su propio régimen de incompatibilidades. Por el contrario, la JEC ha esgrimido un argumento que contradice el Tribunal General de la UE.

Durante la comparecencia, Comín ha acusado a la Junta Electoral de situarse en rebeldía ante la justicia europea y ha mostrado la confianza en que la presidenta del Parlamento, Roberta Metsola, se limite a aplicar el reglamento. "Las incompatibilidades de cargos no tienen nada que ver con condiciones añadidas que pretenden usar para impedir un derecho fundamental, que es el derecho a representación política", ha reprochado.

Comín se ha referido también a la reforma del delito de sedición - "la verdadera homologación con los estados más avanzados en derechos y libertades sería la derogación" - y a las declaraciones del exministro José Barrionuevo sobre los GAL -"los GAL son incompatibles con la UE. Es incompatible el terrorismo estado con formar parte club democracias que conforman UE".