El conseller Jordi Turull, preso en Lledoners, ha avisado de que no se disculpará por nada durante la vista oral por los hechos del 1-O: "En el Supremo, no pediré perdón y reivindicaré lo que hicimos el 1-O y el 27-O", ha dicho en una entrevista publicada en el diario El Periódico. El líder del PDeCAT, que ha estado veinte días en huelga de hambre, ha condicionado el apoyo de su grupo a los presupuestos del Estado español a una propuesta "clara" para mejorar el autogobierno por parte del ejecutivo socialista: "Pedro Sánchez tiene que decidir si piensa en las próximas elecciones o en las próximas generaciones", ha dicho. Con respecto a las relaciones entre JxCat y ERC, Turull ha admitido que la prisión y el "exilio" complican el "día a día" a la hora de pactar una estrategia conjunta.

Desde el centro penitenciario de Lledoners, donde está recluido en régimen de prisión preventiva, ha dicho que no confía en tener un "juicio justo" al Tribunal Supremo porque "no hay igualdad" entre las partes. "Nosotros venimos de una larga prisión provisional, llegaremos esposados, nos trasladarán al calabozo cada día durante meses y no tendremos tiempo suficiente para preparar las defensas", ha explicado a continuación.

Acusado de un delito de rebelión por la Fiscalía y de sedición por la Abogacía del Estado, Turull ha afirmado que irá a la vista "a ganar", aunque considera que la sentencia "puede estar medio pensada" de antemano y que el juicio que se puede convertir en un "escarmiento" para los procesados. Por eso, ha afirmado que además de prepararse para el juicio desde un punto de vista "técnico" —para "desmontar el relato parcial, sectario y lleno de errores a la causa," ha sostenido—, también asume el rol "político" que tendrá su defensa.

"Quiero una salida política, pacífica y democrática para Catalunya. En el Supremo, no pediré perdón y reivindicaré lo que hicimos el 1-O y el 27-O", ha explicado. Preguntado por si renuncia a la unilateralidad para hacer efectiva la independencia de Catalunya, ha respondido que "no renunciarán a nada que sea pacífico y democrático" y que el "derecho internacional" ampara esta vía.

"Hechos palpables"

Por otra parte, el conseller también se ha referido a la negociación de los presupuestos del Estado español al condicionar el apoyo de su grupo a las cuentas a "hechos palpables" y a una propuesta "clara" para mejorar el autogobierno catalán por parte del ejecutivo socialista. El político independentista ha afirmado que el presidente español, Pedro Sánchez, está en deuda con los partidos independentistas en el Congreso por haber dado apoyo a la moción de censura que echó al PP de la Moncloa. Por eso, ha pedido al líder socialista que se moje y presente una solución para resolver la situación política en Catalunya que pase por una votación: "Pedro Sánchez tiene que decidir si piensa en las próximas elecciones o en las próximas generaciones", ha afirmado.

Con todo, ha puntualizado que los socialistas "ni siquiera" han presentado las cuentas a los grupos independentistas y se limitan a pedir "votos a cambio de buenas palabras". Además, en opinión de Turull, no se puede mezclar la situación "humillante" de Catalunya con las conversaciones para sacar adelante los presupuestos. "Los presos no somos equivalentes a una partida presupuestaría", ha dicho.

La prisión y el exilio complican el "día a día"

Con respecto a las relaciones entre los dos principales partidos independentistas en el Parlament, JxCat y ERC, Turull ha admitido que la prisión y el exilio complican el "día a día" a la hora de pactar una estrategia conjunta. "Muchos liderazgos no pueden participar en las decisiones que se tienen que tomar en poco tiempo", ha lamentado. El líder soberanista también ha recordado que, aunque su movimiento viva, según su opinión, en medio de un "acoso policial y judicial", los políticos independentistas tienen que "trabajar para conseguir la unidad que pide a la gente".