No se entiende. La alcaldesa de Sant Cugat, Mireia Ingla (ERC), ha tildado de "disparate" la resolución judicial que la ha condenado a pagar una multa de 500 euros semanales de su patrimonio semanal si no retira, en un periodo de cinco días, la simbología independentista del ayuntamiento. Y es que Ingla ha defendido que "no hay ningún símbolo" en la fachada del consistorio, ya que en junio sacó la gran pancarta que reivindicaba "libertad presos políticos" ante la amenaza de la inhabilitación. "Eso de ahora no tiene ningún sentido porque se me pide una cosa que ya hice", ha aseverado este viernes ante los medios de comunicación.
En los cinco días que la jueza le da de margen para evitar la multa de 500 euros semanales, la alcaldesa ha asegurado que no hará "nada". Es decir, considera que no se expone a ningún embargo "porque la sentencia firme (sobre la pancarta) ya está acatada". Preguntada por un pequeño letrero colgado en un despacho y visible desde la plaza de la Vila, Ingla ha insistido en el hecho de que la resolución judicial "no se refiere a eso, sino a simbología con 'libertad presos' y lazos amarillos en la fachada". Entonces, no sacará los carteles que hay la parte interior de algunas ventanas del consistorio porque no hay ninguno que incluya el lema "libertad presos políticos". "La decisión de junio pedía que se retirara una pancarta de la fachada del ayuntamiento y, cuando la sentencia fue firme, tuve que descolgarla porque me amenazaban con inhabilitarme", ha explicado, "pero ya no queda ninguna pancarta en la fachada".
Contra Ciudadanos
Con todo, Ingla ha cargado contra Ciudadanos para iniciar el proceso judicial "simplemente porque la alcaldesa de Sant Cugat es independentista". "Nadie tiene que decidir quién tiene que hacer de representante público porque nosotros somos escogidos en las urnas", ha remarcado, asegurando que retiró la gran pancarta "coartando" su libertad de expresión. También ha lanzado que no perderá el tiempo "con partidos políticos que, como no ganan las elecciones, se dedican a perder tiempo y utilizar los tribunales". "Yo he venido a hacer de alcaldesa. Si lo que pretenden es que deje de hacerlo, entonces que lo digan claramente", ha añadido. Y para acabar, una serie de preguntas: "¿Qué pretenden? ¿Que cada mañana vaya mesa por mesa de centenares de trabajadores a mirar la simbología de su despacho?".
La resolución judicial contra Ingla ha coincidido con una visita institucional al ayuntamiento de la presidenta del Parlament, Laura Borràs (Junts), que ha mostrado el apoyo a la alcaldesa. Borràs ha pedido no normalizar procesos como el de Sant Cugat y ha atribuido el caso a un "Estado de sitio" que despliega "una represión que no se detiene". "No puede ser que un lazo pueda ser una molestia", ha remarcado, asegurando que "quién se piensa que así ataca al independentista, no se da cuenta de que ataca la democracia". Borràs ha hecho un llamamiento a responder la "represión" con unidad de todo el independentismo. Ha reclamado "saber a quién ataca y hacer una defensa conjunta", y ha remarcado que ella siempre ha acusado "al lado de los represaliados, sin diferencias partidistas."