Salvador Illa se muestra satisfecho ante el acuerdo al cual han llegado los mismos cuatro partidos que firmaron en marzo su acuerdo por la defensa del catalán ante la sentencia del 25% de castellano en las aulas. Con todo, se sigue desmarcando de ERC, Junts y comuns, porque defiende que esta se tiene que cumplir y ha lamentado que el acuerdo, muy similar al primero, haya tardado dos meses en materializarse. En una entrevista en el programa Aquí Cuní de Ser Catalunya, el jefe de la oposición ha identificado lo que, según él, ha provocado este retraso. "Hay formaciones para las que este no es un tema sencillo y han tenido que hacer debates intensos. El problema es que estamos demasiado pendientes de las asociaciones y de las entidades", ha reflexionado Illa, remarcando que estas cuentan con su respeto y "se las tiene que escuchar", pero que no son ellas las que tienen que tomar las decisiones, sino los grupos políticos: "No tenemos que estar tan pendientes de lo que dicen, yo no necesito el aval de ninguna asociación para tomar una decisión, aunque nos hemos reunido y las hemos escuchado", ha insistido el líder del PSC, señalando a Junts, que se descolgó del primer acuerdo después de que las entidades por la lengua se mostraran en contra.
En la misma línea, Illa ha defendido que su partido ha hecho "un esfuerzo extraordinario por la materia de la cual se trataba, llena de simbolismo y muy importante para Catalunya" y que por eso han decidido volver a participar en el acuerdo después de la revisión, ya que "mantiene lo que habíamos dicho en marzo". Por todo ello, ha recordado que cuando hay un acuerdo nunca se está 100% satisfecho y que, en su caso, la concesión radica en el término curricular: "Yo habría preferido que el castellano fuera lengua vehicular, porque no solamente se tiene que aprender, sino que también tiene que servir para aprender", algo que, dice, comparte la mayoría de Catalunya. "Ahora, tienen que ser los centros, en atención a su realidad sociolingüística, los que fijen la presencia de cada una de las lenguas".
Sumar al PP
Aunque el resto de partidos del acuerdo defienden que esta ley servirá para no tener que cumplir la sentencia del 25% de castellano del TSJC, el PSC cree todo lo contrario. "Los socialistas no hemos dado apoyo a una ley contra la sentencia, sino que esta permite cumplirla. Nuestro ánimo no ha sido esquivarla, ya que las resoluciones se tienen que cumplir, gusten o no". Así, su objetivo ha sido "rehacer el consenso lingüístico, que implica garantizar que el catalán siga siendo el centro de gravedad y que el castellano es una lengua de aprendizaje".
El jefe de la oposición también se ha referido al pretendido bloqueo de las tres derechas a esta ley en el Parlament, asegurando que si bien están en su derecho de hacerlo, "los motivos que alegan están totalmente equivocados", ya que el Consell de Garanties Estatutàries no sirve para "bloquear las leyes", como quieren hacer Vox, PP y Ciudadanos, sino garantizar que se adecuan al Estatut. En este sentido, ha asegurado que desea que partidos que han posicionado radicalmente en contra de la ley, en referencia al PP, se plantearan sumarse al pacto: "Hace unos años los populares estaban en los pactos por el catalán, esto no los hará menos españoles", ha defendido.