Terceras o terceras vías, diálogo, voluntad, reforma de la Constitución... El líder del PSC, Miquel Iceta, sigue insistiendo en pactar con el Estado un referéndum para modificar la norma suprema y que, de esta manera, se pueda celebrar otro para que los catalanes puedan decidir su futuro.

Convencido de que el referéndum unilateral de independencia (RUI) "está condenado al fracaso", Iceta ha puesto de manifiesto que, si bien una encuesta de ERC asegure que si fuera una consulta vinculante —aunque no sea pactada con el Estado— irían a las urnas un millón de personas más que el 9-N, "si participan y no sirve de nada, será un fracaso". Y ha puntualizado: "Utilizo la palabra 'fracaso' porque el 9-N no fue vinculante".

Iceta, que ha aprovechado para hablar de su libro, ha puesto encima de la mesa que se tiene que hablar "en plural" de terceras vías como, por ejemplo, "pensar en una reforma de la Constitución que suponga un acuerdo mayoritario" o también lo siguiente: "Que primero me pidan un estado federal" porque está seguro que "la única manera viable es que haya voluntad por las dos partes".

Retrasados

"No estamos ni a la mitad de la mitad que a estas alturas estábamos con el 9-N". Con estas palabras, el primer secretario del PSC ha subrayado que, según su opinión, el referéndum no se celebrará porque considera que no está todo tan adelantado como hace tres años.

También ha aprovechado para compadecerse de los "que prometen una cosa que no pueden hacer" porque, ha asegurado: "No me gustaría estar en su piel". Iceta tiene claro que "lo que nosotros planteamos es difícil, pero es posible" y ha reiterado que él no se ha comprometido para el mes de septiembre. "Como no quiero engañar a los catalanes, digo que un referéndum es legítimo si está dentro de la ley", ha repetido para cerrar la cuestión.