El referéndum unilateral de independencia (RUI) ha irrumpido esta mañana en la campaña de Convergència y ha provocado chirridos. El candidato, Francesc Homs, ha advertido que este tipo de referéndum podría ser boicoteado por los partidarios del 'no', con lo cual se vería afectada su legitimidad democrática. “¿Cómo se hace una RUI si los del 'no' no te la reconocen? La democracia no se puede imponer. Se tiene que compartir”, ha subrayado.

El político convergente ha hecho estas valoraciones al día siguiente que el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, evitara cerrrar la puerta a un referéndum unilateral en el Parlament y en una entrevista a Catalunya Ràdio. Por su parte, el cabeza de lista de ERC, Gabriel Rufián, se havia mostrado esta misma mañana partidario de esta fórmula. 

Según el candidato convergente, un RUI convocado en estas condiciones sería una repetición del 9-N –la mejor presentación que hemos hecho en el mundo desde el independentismo. Pero no era suficiente”–. “La pantalla democrática quiere decir que sea fuente de legitimidad y eso requiere a los del 'sí' y los del 'no'”, ha remachado.

Esta situación obliga, a opinión del candidato de CDC, a hacer “un referéndum reconocido por todo el mundo”. “No habrá ningún instrumento democrático, ninguna pantalla democrática, que no venga del sentimiento de los que se sienten interpelados por parte del 'sí' y 'no'”, ha advertido, señalando una vez más la consulta que se celebró en Escocia.

Desde la campaña convergente se ha querido quitar hierro a las discrepancias del candidato frente a la voluntad del president de evitar descartar la fórmula del referèndum unilateral, pero, los chirridos entre los dos discursos han resultado inevitables.

Homs ha cargado también contra la CUP, a los cuales ha acusado de haber hecho “mucho daño a Catalunya al estilo PP” con la decisión de no retirar la enmienda a la totalidad de los presupuestos, por lo cual ha enviado a los anticapitalistas “al cuarto de pensar”. “La han hecho muy gorda”, ha reprochado.

El candidato convergente ha advertido a ERC que no se puede relativizar el gesto de los cupaires, dado que tienen que cambiar de actitud, y ha advertido que si se ha impuesto la línea dura dentro de la CUP, hay que apoyar a los sectores más dialogantes. “Pasó en Navidad y ahora. Con línea dura, cero condescendencia”, ha advertido.