La CUP ha cargado contra la Aliança Catalana de Sílvia Orriols porque, según la cabeza de lista por Girona al Congreso, Mireia Vehí, el partido ripollés de extrema derecha, "aunque se disfrace de independentista, defiende lo mismo que Vox," practica una política "cobarde y sin alma" y "señala a los más débiles y defiende los poderosos". Justamente desde Ripoll, Vehí ha pedido a ERC y Junts que cierren un pacto en el Consell Comarcal del Ripollès para "echar de una vez" al gobierno de Orriols.

La formación ha acudido a la localidad ripollesa en el segundo día de campaña de las elecciones del 23-J para mostrar su rechazo a las políticas de Aliança Catalana, que gobierna en solitario desde el 17 de junio, y para hacer un llamamiento a las fuerzas de la comarca que se pongan de acuerdo. La constitución del ente comarcal se tiene que hacer el 17 de julio y las formaciones aprovecharán esta última semana para negociar un acuerdo. Al principio de la semana que viene se tiene que producir una reunión a cuatro entre ERC, Junts, PSC y CUP, que hasta ahora habían sido vetados de la negociación por el partido que preside Laura Borràs, según han detallado fuentes de los cupaires a la ACN.

La diputada de la CUP en el Congreso ha detallado que la extrema derecha "no es un problema exclusivo de Ripoll" sino que Aliança Catalana utiliza las mismas políticas que "señalan los débiles para resolver problemas complejos, utilizan noticias fáciles y apuestan por la solución del último contra el penúltimo". Ante el "ciclo complicado" en el cual ha predicho que puede entrar la política después de las elecciones en el Congreso, por una posible victoria de las derechas españolas, Vehí ha pedido "parar la extrema derecha con toda la generosidad" y no solo desde las instituciones, sino también desde la calle". "Que la gente se implique, se organice y muestre un rechazo constante y cotidiano", ha dicho.

Por otra parte, la cabeza de lista por Girona ha afirmado que si Aliança Catalana decide dar el salto a la política parlamentaria catalana con otros partidos, tal como ha afirmado Orriols, "será más fácil que veamos una cosa muy clara y es que aunque se disfrace de independentista está defendiendo lo mismo que Vox". En concreto, Vehí ha afirmado que Orriols "no es tan diferente de la extrema derecha de Madrid" porque también considera que "el problema en nuestra casa es la población migrante".

"Una comarca abandonada"

El concejal de Alternativa per Ripoll-CUP en el Ayuntamiento ripollés, Dani Vilaseca, ha afirmado que tres semanas después de la constitución del consistorio "hay una posibilidad" de llegar a un pacto en el ente comarcal y ha recordado que ya se alcanzó un acuerdo una semana antes de la investidura de Orriols. "Este acuerdo lo que tiene que hacer es echar de una vez por todas lo extrema derecha de la alcaldía", ha pedido el concejal. El concejal cupaire ha avisado a los partidos que quieren ser alternativa a Aliança Catalana de que "nadie entenderá que en un sitio lleguen a un acuerdo y en otro no". Vilaseca ha insistido en que "cada día que pasa con la extrema derecha en el Ayuntamiento es un día que perdemos para la lucha en favor de los derechos sociales, de una vivienda digna, de una sanidad y de una educación pública fuerte". Vilaseca ha añadido que el auge de Alianza Catalana en Ripoll se explica porque es una "comarca abandonada" tanto por los gobiernos de la Generalitat como del Estado, pero pide abordar esta dejadez hablando de "desigualdad, de vivienda, y de pobreza" y no "culpabilizando solo a un colectivo".

Serán "generosos" en Madrid

La CUP dice que combatirá la extrema derecha al Congreso de los Diputados "de la forma más generosa posible" pero avisa de que su condición para investir a Pedro Sánchez sigue siendo "fecha y pregunta" de un referéndum de autodeterminación después de las elecciones del 23-J. Lo ha asegurado este sábado en Ripoll la cabeza de lista de Girona, Mireia Vehí, que ha afirmado que las propuestas sociales de Sumar como reducir la jornada laboral son "papel mojado" porque después quieren gobernar con el PSOE que tiene propuestas como subir la edad de jubilación a los 70 años. "Diremos no a la derecha y a la extrema derecha, pero no lo haremos para salvar al PSOE, que es un partido del régimen, una empresa que nunca cierra. Lo haremos para salvar nuestro pueblo y eso se llama fecha y pregunta de un referéndum", ha insistido la líder anticapitalista.