El fracaso de la cumbre contra la sequía ha vuelto a tensar las relaciones entre el Govern y los partidos de la oposición. Y es que la reunión de este viernes para definir una estrategia de país para abordar la sequía acabó sin ningún tipo de acuerdo. Sin embargo, al día siguiente, el PSC instó al ejecutivo de Pere Aragonès a convocar un nuevo encuentro. Pero el Govern no ve "ningún sentido" en convocar otra cumbre contra la sequía a corto plazo, tal como han explicado a la Agència Catalana de Notícies fuentes gubernamentales.

No obstante, el Govern asegura que continuará en contacto con los grupos parlamentarios para llegar a consensos sobre la cuestión de la sequía. El Govern, sin embargo, también critica que el PSC haya pedido una nueva reunión solo 12 horas más tarde de la finalización de la cumbre de este viernes. En Palau creen que el PSC es consciente de que no ha estado "a la altura de la situación" y añaden que el ejecutivo sí que lo estará.

Así pues, el Govern no tiene prevista ninguna nueva cumbre a corto plazo. A pesar de la falta de acuerdo de la cumbre del agua de este viernes, el ejecutivo de Aragonès tirará adelante todas las medidas que ya estaban consensuadas en el documento abordado en la reunión del viernes.

La cumbre fracasa por una falta de acuerdo en torno al régimen sancionador

La cumbre de este viernes entre Govern y partidos para hacer frente a la sequía ha fracasado. Según ha indicado la consellera de Acció Climàtica, Teresa Jordà, no se ha llegado a ningún tipo de acuerdo porque no había consenso en torno al régimen sancionador, que el decreto ley aprobado ya prevé aunque no especifica ningún calendario.

Pues bien, Jordà ha señalado que el punto sobre el régimen sancionador "ha saltado" porque un grupo parlamentario (no ha especificado cuál, pero se refería al PSC) no estaba de acuerdo con la propuesta de acuerdo que traía el Govern.

El régimen sancionador es uno de los puntos que la propuesta de acuerdo que el Govern planteaba. Concretamente, proponía establecer un periodo diferido (una moratoria) de aplicación del régimen sancionador por exceso de dotación de agua hasta el 1 de julio, una fecha que ya se movía de lo que el Govern había planteado inicialmente, que era el mes de junio.

"Finalmente, para que todo el mundo se sintiera más cómodo, la fecha escrita en el documento de acuerdo era el 1 de julio", ha explicado Jordà. Sin embargo, ha remarcado que en este punto un grupo parlamentario concreto no ha estado de acuerdo, en referencia al PSC. El punto del régimen sancionador, han indicado fondos de la negociación a la ACN, era lo único que requería aprobar un nuevo decreto ley para ser aplicado.