El Govern y Junts han dado este miércoles el pistoletazo de salida a una peculiar negociación de presupuestos después de que el acuerdo de legislatura entre las dos formaciones saltara por los aires hace a penas tres semanas. El ejecutivo de Pere Aragonès ha admitido que la ruptura con Junts hace descarrilar el calendario previsto para sacar adelante las cuentas, pero ha activado una operación de presión a los exsocios a los cuales emplaza a un "ejercicio de responsabilidad" para facilitar la aprobación de un proyecto que, según se encargan de recordar, puso en marcha un conseller de Junts, Jaume Giró. Por su parte, Junts ha dejado claro que la situación ha cambiado radicalmente, también para los presupuestos.

Entre las presiones de los unos y las distancias de los otros, la consellera de Presidència, Laura Vilagrà, y la consellera de Economía, Natàlia Mas, se han reunido este miércoles durante una hora y media con los negociadores de Junts, la portavoz del grupo parlamentario, Mònica Sales, y los diputados Joan Canadell y Jordi Munell.

Sin Giró

A la reunión no ha participado el exconseller Giró, aunque, según fuentes del partido, tanto el secretario general, Jordi Turull, como el presidente del grupo parlamentario, Albert Batet, le propusieron que tomara parte. No obstante, el exconseller a pesar de aceptar colaborar en la preparación de los encuentros, declinó estar en las reuniones precisamente para no condicionar a los negociadores de Junts y permitir que pudieran actuar con plena libertad.

Y así lo han hecho. En declaraciones en los pasillos del Parlament, la portavoz del grupo parlamentario ha reiterado antes de salir hacia el Palau de la Generalitat que "el conseller trabajaba en unos presupuestos que respondían a un contexto de un gobierno de coalición. Este contexto ha cambiado".

Seguir negociando

Sales ha asegurado que el objetivo de Junts era conocer la orientación política de los presupuestos y saber con qué apoyos contaba el Govern para sacarlos adelante. Antes de entrar en el encuentro, la diputada de Junts ya ha obtenido una respuesta a esta pregunta: la CUP ha anunciado que plantaba la reunión a la cual le había citado el Govern que ha tildado de propaganda y fuegos artificiales. Pocas horas antes, la portavoz del ejecutivo, Patrícia Plaja, había situado a la CUP, al igual que a Junts i a los comuns, como socios prioritarios, a pesar de que había dejado claro que el PSC también participaría en la ronda de conversaciones.

El encuentro entre las conselleres y los exsocios de Junts no ha aportado novedades, según fuentes de los asistentes y se ha reducido a una primera toma de contacto. Se ha desarrollado en un tono cordial y ha servido para exponer las líneas maestras del presupuesto, según fuentes del Govern que han valorado positivamente el encuentro, y han instado en Junts a "seguir negociando para poder aprobar las cuentas". La presión continua.