El Govern asegura que el reconocimiento de la oficialidad del catalán sería una contribución "significativa" que podría hacer la Unión Europea "en favor del progreso y la estabilidad". Así lo indica en el argumentario que el ejecutivo ha traducido y enviado a los 27 estados miembros, una ficha donde se enumeran todos los motivos para acelerar un proceso que "viene de muy lejos". Según el Govern, el catalán se encuentra ante "una gran oportunidad" y una decisión que considera "inaplazable" para corregir "una grave anomalía histórica" que afecta a los derechos de diez millones de hablantes. El documento, tal como explica la ACN, será una de las herramientas que utilizará al ejecutivo en la "nueva ofensiva" que iniciará la próxima semana por el reconocimiento y que incluirá viajes al exterior y campañas publicitarias.

La televisión y las webs en catalán

El argumentario empieza destacando que el catalán es una lengua que tiene cerca de diez millones de hablantes en la Unión Europea, siendo una de las 15 lenguas oficiales más habladas al Viejo Continente y a niveles similares a idiomas como el griego, el sueco, el búlgaro, el croata o el danés. "Más de nueve millones de personas usan el catalán con más o menos frecuencia cada día en el ámbito laboral o escolar en el estado español", indica. El documento también menciona la relevancia del catalán en el ámbito universitario -se puede estudiar en 150 universidades por todo el mundo-, en el ámbito comunicativo y audiovisual -existen más de una veintena de canales de televisión en catalán, más de 200 emisoras de radio y más de 30 diarios en papel y digitales- y en el ámbito institucional.

Con respecto al uso tecnológico, el Govern recuerda que cuatro de las cinco webs más visitadas del mundo tienen versión en catalán -Google, YouTube, Facebook y X-, mientras que en el sector cultural destaca que la producción es "muy comparable" a la de otras lenguas como el noruego o el finés, mencionando la publicación de 10.059 títulos de libros en catalán el año 2021 (para el finés fueron 9.651, por ejemplo). "El catalán dispone de instituciones que velan por su uso, desarrollo y normalización; [...] es una lengua que está perfectamente estandarizada y dispone de recursos normativos y tecnológicos plenamente desarrollados; de hecho, tiene un equipamiento superior al de otras lenguas ya reconocidas como oficiales para|por la UE", apunta al ejecutivo.

Una reivindicación histórica

En el mismo argumentario, el Govern señala que la reivindicación del catalán "viene de muy lejos" y que se encuentra ante el reto "mayúsculo" de evitar ser sustituida por la lengua castellana. "Por eso es importante que el catalán disfrute del reconocimiento, de la protección y del impulso que merece", reza el texto. De hecho, el Govern habla "de anomalía democrática" y lamenta que esta situación se traduzca en la "vulneración de los derechos lingüísticos" de unos diez millones de ciudadanos europeos. "En el nuestro parar, contraviene en las bases fundacionales de la misma UE", indica.

En más, pone de manifiesto, que, después de cuatro décadas, finalmente el catalán se haya reconocido oficialmente en el Congreso de los Diputados. "En este sentido, la declaración del catalán como lengua oficial de las instituciones europeas será un paso más para conseguir la plena normalidad", dice.

En paralelo, el Govern asegura que el reconocimiento del catalán no provocará un efecto dominó, como algunos estados han sugerido. De hecho, el ejecutivo deja claro que la petición de oficialidad es un asunto de cada país, ya que el reglamento europeo establece que la oficialidad en el mismo estado es la condición previa para llegar a la oficialidad de las instituciones. El caso del catalán -así como del vasco y el gallego- es "claramente singular", ya que España es el único país en que ha habido peticiones "con amplio apoyo social e institucional". Al mismo tiempo, más allá del catalán, el vasco y el gallego, las únicas dos lenguas en Europa no reconocidas y que son oficiales a las instituciones de su territorio son el frisón y el feroés.

La barrera del coste económico

Si bien el Govern entiende que "la defensa de los derechos de los ciudadanos no se tendría que ceñir a una discusión económica", el documento también presenta argumentos de este tipo. En primer lugar, el texto hace mención a unos datos recogida para la Comisión Europea el año 2013 donde cifraba en 1.000 millones de euros el coste de las traducciones de las 24 lenguas actuales del conjunto de instituciones europeas. "Esta cantidad equivale a menos del 1 del presupuesto europeo, poco más de 2 euros por ciudadano al año", expone.

Además, el ejecutivo asegura que la mejora de herramientas de traducción automática y la inteligencia artificial hacen prever que los costes de traducción se puedan reducir "notablemente" los próximos años. Por otra parte, recuerda que un 25% de los intérpretes en plantilla a las instituciones europeas y un 30% de los intérpretes de la bolsa de personal externo de la UE también son competentes para trabajar en catalán.

"El Govern de Catalunya puede garantizar que lo tiene todo a punto y que está a la plena disposición de las instituciones europeas, si estas lo requieren, para desplegar las actuaciones de impulso necesarias para hacer efectiva la oficialidad con la máxima celeridad", resume. La presentación del argumentario es una estrategia que va en paralelo a la "nueva ofensiva" que tiene previsto lanzar el Governa partir de la próxima semana a varios niveles, tal como anunció recientemente el presidente Aragonès.

Por una parte, la consellera de Acción Exterior, Meritxell Serret, tiene previsto reunirse los días 16 y 17 de octubre en Madrid con embajadores de los diferentes estados miembros para tratar la cuestión. Para la otra, la delegación del Govern ante la UE tiene programadas en Bruselas varias reuniones con representantes de los 27, mientras que desde el ejecutivo se seguirá haciendo interlocución con otros gobiernos europeos.

Al mismo tiempo, el mismo Govern pondrá en marcha a lo largo de los próximos días una campaña publicitaria -tanto en la red como en la vía pública- en los diferentes países de la UE. Los anuncios estarán traducidos a los idiomas de cada estado y buscan influir en la opinión pública con el fin de aglutinar más apoyo de la ciudadanía. La próxima fecha relevante clave para la oficialidad del catalán en la UE será el 24 de octubre, cuando Luxemburgo acoja un nuevo Consejo de Asuntos Generales. Allí está previsto que los ministros de Exteriores de la UE debatan nuevamente sobre este tema, aunque no se prevé una votación formal.