El Govern ha derogado un decreto de 2009 que impedía el desarrollo de las renovables en Catalunya y al mismo tiempo ha llevado a cabo varios cambios legales para que se puedan tramitar instalaciones eólicas y fotovoltaicas en 13 meses para agilizar la implantación de estas energías.

La derogación de este decreto era una demanda histórica del sector, y el Gobierno ha aprovechado el nuevo decreto ley para ir más allá e introducir cambios en la ley catalana de urbanismo. Se retén que la normativa actual "deje de obstaculizar" la implantación de parques eólicos y fotovoltaicos en Catalunya, asegura la consellera de Empresa de la Generalitat, Àngels Chacón.

Chacón ha explicado que Catalunya tenía hasta ahora "una especie de cotilla" que frenaba la implantación de renovables, y que por esta razón se ha eliminado el llamado mapa eólico, que obligaba a que cualquier parque superior a 10 megawatts se tuviera que situar en las llamadas Zonas de Desarrollo Prioritarias (ZDP).

PARQUE EÓLICO

Imagen del parque eólico de Sant Antoni de la Granadella / ACN

Novedades del decreto

El decreto, que ahora tiene que ser convalidado en el plazo de un mes por el Parlamento, crea un nuevo procedimiento para tramitar parques eólicos y fotovoltaicos de hasta 50 MW (la tramitación de los de mayor potencia es competencia del Estado), de manera que desde la solicitud a la administración al inicio de las obras el proyecto podrá tramitarse "en 13 meses".

El director general de Energía de la Generalitat, Pere Palacín, ha matizado, sin embargo, que este será el plazo "ideal" en caso de que el solicitante tenga toda la documentación preparada. En cualquier caso, para facilitar las cosas, el Gobierno habilitará una ventanilla única desde la cual se tramitarán todas las autorizaciones: el ambiental, la urbanística y la energética.

Otra novedad del decreto es que potenciarán las pequeñas instalaciones destinadas al autoconsumo en zonas urbanas, como las placas fotovoltaicas en los terrados de los edificios, que podrán tramitarse con facilidad siempre que la altura de las instalaciones no se eleve más de un metro sobre el límite de remonta del edificio.

El nuevo decreto también impedirá situar instalaciones renovables en aquellas partes del territorio que forman parte de la red Naturaleza 2000, aunque con algunas excepciones, como la de un municipio que esté situado plenamente dentro de esta área protegida y se trate de instalaciones de tamaño pequeño y para autoconsumo.

Con todos estos cambios, el Gobierno considera que las renovables podrán desarrollar en Catalunya "al mismo nivel" que en otras comunidades. Catalunya se ha propuesto tener el año 2030 una potencia instalada de unos 14.000 megavatios en eólica y 6.000 más en fotovoltaica.