El Govern ha abordado durante la reunión de este martes la situación provocada por el dictamen del Consell de Garanties Estatutàries, que considera inconstitucional la disposición adicional 31 de los Presupuestos. Esta disposición recoge el compromiso de dotar la partida para la celebración del referéndum y fue una de las exigencias de la CUP para apoyar las cuentas.

Durante la reunión del ejecutivo se ha puesto encima de la mesa las tres alternativas posibles que plantea el dictamen, desde ignorar la decisión del Consell -que no es vinculante-, hasta retirar la disposición adicional o bien introducir enmiendas, según fuentes del Govern.

Escuchar al Consell

Todos los consellers han expresado su opinión y, de manera muy mayoritaria, se han inclinado para tener en cuenta el pronunciamiento del Consell de Garanties aunque no sea vinculante. El argumento es que la apuesta explícita del ejecutivo por la legalidad catalana no se puede abrir paso ignorando los dictámenes de un órgano que emana del Estatut. La posibilidad de desoir al Consell prácticamente no ha tenido apoyo.

Por esta razón, como conclusión del debate, se ha encomendado al vicepresidente, Oriol Junqueras, dirigir los contactos con los cupaires para buscar un acercamiento después de que esta formación había reclamado no hacer caso del dictamen.

Las conversaciones empezaron ayer mismo, pero la previsión es que el pleno que empieza este miércoles agilice la negociación para decidir la respuesta y como tramitarla. De hecho, la CUP tiene viva una enmienda -es decir, que no se votó en comisión y se defenderá en el pleno- en qué se plantea una modificación del texto de aquella disposición. Además, la Mesa ha fijado un nuevo plazo de tres días para presentar enmiendas sobre el dictamen.

Compromiso claro e irrenunciable

La consellera de Presidencia, Neus Munté, ha explicado en la rueda de prensa posterior a la reunión del consejo ejecutivo que Junqueras abriría conversaciones con la CUP y CSQP para encontrar "el instrumento más eficaz" para dar respuesta a esta situación.

Munté se ha mostrado convencida de que se encontrará la "solución" y confiada que los presupuestos no corren ningún peligro porque el compromiso del Govern con el referéndum es "claro, nítido, explícito e irrenunciable". Ha insistido en que no habrá "ningún desvío" en este objetivo y ha descartado también que la CUP pueda retirar su apoyo a los presupuestos a raíz del dictamen.