La variante de Vallirana (B-24) ha puesto de relieve las graves carencias de esta infraestructura. Inaugurada el pasado 5 de noviembre, poco más de dos meses después ha presentado una imagen más propia de un túnel de otras épocas. El temporal Gloria hizo que se destaparan las graves deficiencias de impermeabilidad y se pudieron ver grandes charcos de agua en el interior. Este es el estado del túnel que el diario el La Premsa del Baix ha publicado.

tunel

La variante de Vallirana se anunció como la más moderna de Europa, con una inversión de 176 millones de euros, y fue recibida con alegría por parte de sus vecinos, que llevaban años reivindicándola. El tramo de tres kilómetros de carretera trajo 15 años de obras. Lo que se ha visto esta semana ha sido otra imagen. Los usuarios también denuncian la falta de cobertura móvil y el peligro que suponía la acumulación de agua. "Auténticas cascadas de agua", así es como lo definen los que se encontraron esta semana dentro del túnel, dónde se tuvo que cortar un carril.

El ayuntamiento de Vallirana y las autoridades responsables todavía no se han pronunciado al respecto.